CHACO
El presunto asesino, un violador serial que estaba en libertad condicional
Juan Ernesto Cabeza es el conductor del remís en el que se vio por última vez a Tatiana Kolodziez, cuyo cuerpo fue hallado esta tarde. Fue condenado a 24 años de prisión por cuatro casos de abuso. La obsesión por sus víctimas Cabeza fue detenido el sábado, horas después de que se haya reportado la desaparición de Tatiana Kolodziez, a quien había subido a su auto luego de que ella pidiera un remís desde su casa.
Según algunas versiones, el hombre habría confesado ser el autor del crimen de la joven de 33 años cuya desaparición había movilizado a la sociedad chaqueña en los últimos días.
El hombre había sido condenado en 1997 a 16 años de prisión por la violación de tres mujeres de entre 19 y 27 años, ocurridas en marzo de 1996. Un juicio posterior agregó una segunda sentencia de 8 años por un cuarto caso de similares características. Todos los hechos sucedieron en el taxi que manejaba entonces.
Además de la violación, el Tribunal Oral número 6 de Capital Federal incluyó los delitos de privación ilegítima de libertad y robo en la condena.
El juicio fue posible gracias a la valentía de sus víctimas, que pese al temor que les infundió esa experiencia (una de ellas era virgen en el momento de la agresión) se animaron a denunciarlo y a someterse a los exámenes para confirmarlo.
A partir de sus testimonios la Justicia indicó que Cabeza tenía una conducta a la hora de atacar. El proceder comenzaba con una amenaza con una réplica de arma, con la cual robaba las pertenencias; luego las violaba en el asiento trasero del auto. Dos de esos episodios ocurrieron en un Renault 9 y otro en un Peugeot 504.
Gracias a las pertenencias que había robado, el agresor conseguía los teléfonos y direcciones de sus víctimas, a quienes luego amenazaba, perseguía o incluso “invitaba a salir”.
Fue esa conducta obsesiva la que permitió su captura. En una de sus incursiones por las inmediaciones del domicilio de una de las mujeres, la madre de la víctima logró anotar la patente del vehículo que utilizaba. Aunque el hombre había intentado cambiar su aspecto físico afeitándose la barba, la policía logró atraparlo.
Cabeza cumplió la última parte de su pena en una prisión cercana a la capital chaqueña, Resistencia. Luego de que se le otorgara la libertad condicional el mes pasado, consiguió una licencia de conducir en Puerto Vilelas, una pequeña localidad la provincia, lo que le permitió acceder a su trabajo de remisero.
Martes, 23 de octubre de 2012