EN EL DÍA DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN
Itatí recibió cerca de 100.000 visitantes durante las últimas tres jornadas
El pueblo de Itatí volvió a convertirse en el centro de peregrinaje masivo, como era antes de la pandemia. El regreso de los peregrinos sin restricciones a la localidad fue incesante y masiva, con un mayor aluvión de gente que estuvo desde el martes 7, viviendo el 406º aniversario de la fundación de la ciudad.
Regresaron los peregrinos al pueblo de la Virgen. En bicicleta, a caballo, automóviles y colectivos, desde el lunes llegaron miles de devotos.
Claro que estuvo lejos de las peregrinaciones históricas que tuvo Itatí en años anteriores, con 250.000 y hasta 300.000 devotos. Pero según las autoridades turísticas del Municipio, la presencia de gente que llegó desde distintos puntos de la provincia y también desde distritos vecinos, es de destacar.
Según señaló el director de Turismo de Itatí, Roberto Valdez Toñánez, que sin los registros cerrados, se animó a estimar que sólo ayer -por el martes- hubo unos 70.000 visitantes, "y a eso hay que sumarle todos los que estuvieron en los últimos dos o tres días y los que llegaron hoy por eso estaríamos cerca de los 100.000 visitantes. Hay gente que vino a quedarse varias jornadas, hasta hoy en el Día de la Inmaculada Concepción de María", dijo el funcionario en declaraciones a la prensa.
"Hay gente desde hace días. Muchos aprovecharon el fin de semana para llegar hasta la localidad. Se adelantaron para poder visitar a la Virgen, justo antes de esta fecha especial".
El hecho que se hubieren levantado las restricciones de ingreso, dado los bajos contagios de coronavirus, casi nulos en el pueblo de la Virgen, contribuyó a que los devotos decidieran acercarse a rendir culto a la Virgen de Itatí y a través de ella a María.
Desde Posadas (Misiones), pero también desde Santo Tomé, Chaco, Santa Fe e inclusive Formosa, llegaron grupos de ciclistas, que participaron de un tradicional peregrinaje en bicicleta que se hace desde hace 41 años, que estuvo suspendido el año pasado por la pandemia pero que en esta ocasión se decidió retomar con muchos participantes.
Hubo familias, cuyos algunos miembros hicieron el recorrido desde la capital correntina hasta Itatí a caballo, lo que les demandó dos días de viaje, pero era la promesa hecha al Madre de Itatí.
PURA Y LIMPIA
Durante la misa central que estuvo presidida ayer por el arzobispo de Corrientes, monseñor Andrés Stanovnik, el prelado hizo hincapié en la figura de María, la Virgen, "a la Pura y Limpia Concepción".
"Inmaculada significa que aquella jovencita de Nazareth fue pura y limpia, es decir, impecable, desde que fue concebida por sus padres, por eso Inmaculada Concepción. Recordemos el tradicional saludo ‘Ave María Purísima’, al que respondemos: ‘Sin pecado concebida’. Algo así no sucedió ni sucede con ningún ser humano. Todos nacemos con una misteriosa inclinación al mal, aunque no queramos hacerlo. A san Pablo le pasaba lo mismo y lo expresaba así: ‘En vez de hacer lo bueno que quiero hacer, hago lo malo que no quiero hacer’. ¿Acaso nosotros no decimos lo mismo y después nos arrepentimos? Y decimos ¿por qué me habré metido en esas cosas? ¿Vieron qué extraños que somos no? Hay como una tendencia dentro nuestro que nos lleva a hacer cosas de las que después nos arrepentimos".
"Así como en compañía de una buena persona nos sentimos bien, y nos resulta agradable estar con ella, mucho más nos sentimos bien con la Virgen María, que está llena de bondad. Junto a ella nos damos cuenta que así deberíamos ser todos, que Dios nos creó para que fueras personas llenas de gracia y bondad, así como es él. Porque fuimos creados a su imagen y semejanza".
"Pero el misterio del mal hace estragos en la vida de las personas que se dejan engañar y confundir con él. Por él las consecuencias de ese engaño y confusión están muy bien explicadas en Adán y Eva, que nos representan a todos".
"Creados para amar, transgreden esa vocación y deciden quedarse con todo dejando de lado a Dios, para vivir sintiéndose dueños de la vida y no responder ante nadie. ¿Acaso no nos pasó eso a nosotros? Cuando uno golpea al compañero, a la compañera, en el fondo actúa con soberbia creyéndose que es dueño, no solo de la propia vida sino de la vida de los otros. Es muy interesante la palabra de Dios, nos da claridad para saber quiénes somos y qué nos pasa. También nos da luz para saber qué tenemos que hacer".
Jueves, 9 de diciembre de 2021