ESCRIBE: Sebastián Pardo*
4 años y siete meses de la desaparición del comerciante correntino Jorge Augusto Rojas: La Justicia paralizada y sin respuestas
Jorge Augusto Rojas, tenía 69 años cuando desapareció, de profesión comerciante, separado desde hace mucho tiempo, vivía con otra mujer en su casa de Av. Libertad, padre de tres hijos, llevaba una vida normal como cualquier ciudadano de Corrientes. Una de sus hijas lo llamó alrededor de las 22:00 hs. del día 18 de diciembre de 2007 a su teléfono celular, él la atiende y en voz baja le dice que en ese momento no podía hablar, porque estaba discutiendo con C, y quedaron en hablar más tarde.
Ese fue el último contacto con su familia, esa fue la última noticia que se tuvo de él. No se volvió a comunicar con ninguno de sus hijos, no contestó ningún llamado de amigos. En el domicilio del Sr. Rojas, con posterioridad a su desaparición se encontraron manchas de sangre, debidamente tomadas por especialistas y que resultaron compatibles con las de un ser humano. En fecha 12-01-08, se interpuso formal acción de Habeas Corpus, a favor del desaparecido Jorge Augusto Rojas, arrojando resultado negativo en cuanto a su paradero. Se dio inicio a la investigación judicial correspondiente en el juzgado de instrucción competente.
Uno de los automóviles en los que se desplazaba el señor Rojas fue encontrado en un campo cercano a la ciudad de Corrientes, lavado, con las alfombras arrancadas del interior. Todas las pertenencias del Sr. Rojas se hallaban en su vivienda, sus anteojos de receta, sus medicamentos (que debía tomar diariamente) su ropa y sus documentos personales. Con posterioridad a su desaparición comenzaron a venderse sin poder alguno, vehículos de su propiedad. Se presentaron innumerables pruebas en el expediente, pericias, testimonios, documentos. Los distinto fiscales intervinientes solicitaron al juez de instrucción cite a prestar declaración indagatoria a las personas fuertemente sospechadas de tener vinculación directa e indirecta con el hecho. Solicitaron además la detención e incomunicación de los mismos, a los efectos de evitar entorpezcan el avance de la investigación. Peticionaron a su señoría el allanamiento de la finca donde se sospecha estuvo privado de su libertad el Señor Rojas.
El Juzgado de instrucción competente no hizo lugar a ninguna de estas medidas. La querella peticiono en igual sentido. Tampoco se hizo lugar. Desde el 18 de diciembre de 2007 hasta el día de la fecha del año 2012, Jorge Augusto Rojas se encuentra desaparecido. Las personas fuertemente sospechadas se pasean por las calles de nuestra ciudad, sin que siquiera se les haya pedido las mínimas explicaciones.
Pueden ir a tomar mate en la costanera y cruzarse conmigo o con usted, lo mismo en un supermercado, en el shopping, o en el cine, y hasta es probable que se sienten a su lado. Dice un viejo y desgastado refrán: “la justicia es lenta pero llega”. Todo indica que para Jorge Augusto Rojas, ya es demasiado tarde.
*Abogado querellante, representante de la familia Rojas.
Sábado, 21 de julio de 2012