FITNESS
Cómo el ejercicio interválico evita la diabetes y las enfermedades cardíacas
Un estudio científico evaluó el impacto de las rutinas aeróbicas en períodos de intervalos en pacientes con síndrome metabólico. Cuáles son los beneficios que otorga este tipo de actividad
Ya es una sentencia en el mundo fit. Lo más beneficioso y productivo para los atletas es entrenarse en períodos interválicos. La aparición hace unos años del popular método HIIT (ejercicios de alta intensidad en intervalos) con la abundantes mejoras para el organismo que fueron descubriendo los científicos dio lugar a que las rutinas se piensen en sesiones exprés.
Entre los frutos que otorga la actividad, están el aumento de la resistencia y la quema grasa de manera más efectiva. Y ahora un nuevo estudio publicado en la revista Scandinavian Journal of Medicine & Science in Sports reveló que hacer ejercicio aeróbico interválico también mejora la condición física y la salud de los pacientes con síndrome metabólico.
El síndrome metabólico es un grupo de condiciones que ponen en riesgo al afectado de desarrollar una enfermedad cardíaca y diabetes tipo 2. Aunque no está definido se cree que lo podría causar el progresivo envejecimiento, el sedentarismo de la población y la resistencia a la insulina. Estas condiciones son hipertensión arterial, glucosa alta en la sangre, niveles sanguíneos elevados de triglicéridos (un tipo de grasa), bajos niveles sanguíneos de HDL (colesterol bueno), obesidad y exceso de grasa alrededor de la cintura.
Puntualmente, los investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid, en colaboración con pares de la Universidad de Copenhague (Dinamarca) detallaron que realizar este tipo de ejercicio tres veces a la semana, intercalando sesiones de actividad intensa con otras suaves o moderadas, la condición física y la salud de los pacientes con síndrome metabólico mejoran. Así lo encontraron en un grupo de voluntarios que fueron evaluados durante seis meses.
Los especialistas observaron otros cambios significativos en algunos indicadores de salud, específicamente en la masa grasa corporal, el perímetro de cintura y la tensión arterial: "El mayor cambio fue en lo relativo a la tensión arterial, debido a que los valores de la presión sistólica y diastólica llegaron a bajar un 10 por ciento, lo que implica una o dos pastillas menos al día para las personas con síndrome metabólico", explicaron en el informe.
Además, detallaron que la pérdida de peso registrada fue similar a la que se perdería con una restricción calórica de 500 kilocalorías por día. Sin embargo, el ejercicio no pudo modificar otra variable directamente relacionada con el trastorno, como lo es la sensibilidad a la insulina.
Jueves, 22 de junio de 2017