FITNESS
Entrenar durmiendo: el curioso método furor "Napercise"
Una cadena de gimnasios londinenses ofrece una nueva y peculiar variante de ejercitarse. En lugar de someter al cuerpo a extenuantes sesiones de actividad física, les brinda la oportunidad de descansar
Formas de ejercitar el cuerpo hay cientos. A lo largo de años fueron surgiendo distintas variantes para trabajar la figura. La creatividad se convirtió en una condición sine qua non para elaborar las nuevas propuestas en el mundo fit. Con prácticas de mayor exigencia, con otras de menor intensidad, con un ambiente especialmente aclimatado, con variabilidad de duración, con el apoyo de elementos y hasta la compañía de animales, parecía que las ideas se estaban acabando. Pero no. Un nuevo método dispuesto por una cadena de gimnasios de Londres despertó la sorpresa.
¿De qué se trata la nueva moda que comienza a imponerse? Básicamente, consiste en dormir. Los centros de entrenamiento David Lloyd Club tomaron una gran popularidad en los últimos días muy popular a raíz del lanzamiento de "Napercise", unas clases donde los participantes abonan una determinada suma de dinero simplemente para dormir en camas individuales. El objetivo de la tarea, dicen los creadores, es revitalizar la mente, mejorar el estado de ánimo y quemar calorías, apelando a la importancia de un buen descanso, que muchos ignoran.
Está demostrado. De acuerdo a una numerosa cantidad de estudios e investigaciones, el sueño juega un rol fundamental para el bienestar físico y mental. Favorece la concentración, disminuye el riesgo de contraer diferentes enfermedades, reduce el estrés y la ansiedad, entre otras ventajas que brinda. Por estas razones, surgió la innovadora idea que les propone una rutina de 60 minutos, en las que 45 minutos están destinados a una sesión de sueño y relajación ininterrumpida.
Las clases de Napercise -un nombre compuesto que al traducirlo combina las palabras siesta y ejercicio- comienzan y terminan con una serie de ejercicios de estiramiento. En el medio, se reserva el momento para la siesta, con un antifaz, una cama confortable y un ambiente con música suave como aliados. La idea es combatir la fatiga, el desgaste producido durante la jornada diaria, para algunos más ajetreadas que otros. Y recuperar el poco tiempo de sueño por las noches.
La propuesta capturó rápidamente la atención y es un éxito. En menos de un mes, más de un centenar de personas se anotaron. Las reservas están completamente saturadas todos los días, ya que se llenan de padres exhaustos y adultos con un ritmo de vida agitado y estresante, dispuestos a pagar por unos minutos más de sueño. Como agregado extra para un descanso de plena tranquilidad, el club cuenta con guardería y cuidadoras, de modo que los clientes puedan dejar a sus hijos a resguardo y no deban preocuparse por ellos.
Martes, 30 de mayo de 2017