MASCOTAS
La incansable tarea de los que buscan recuperar la diversidad del reino animal
Una de las mayores preocupaciones del mundo de la ciencia siempre fue la preservación y conservación del ecosistema y de las especies que conviven en él. Constantemente se desarrollan teorías e investigaciones vinculados a esta materia.
Desde la búsqueda global de 25 especies perdidas en 510,1 millones km², superficie total del planeta tierra, hasta elevar la biodiversidad a través del rescate genético de especies en peligro o extintas al mejor estilo Jurassic Park, éstas son algunas de las misiones de los científicos en este comienzo de año 2017.
Sin ir muy lejos, el año pasado la noticia de la aparición del Ocelote en el Litoral argentino, especie que se dio por extinta en la zona, abrió un abanico de posibilidades de recuperar especies que desde hace años no son vistas ni analizadas por el ser humano en estado de investigación.
El comisario de medio ambiente de la Unión Europea Stavros Dimas afirmó en su estudio "Ante el desafío comunitario de proteger la biodiversidad", su preocupación ante la velocidad de la desaparición de especies y ecosistemas.
"La destrucción de hábitats, contaminación, sobreexplotación y cambios climáticos son las principales razones de la perdida de la biodiversidad, hoy podemos hablar de que el índice global de extinción de especies es al menos 1000 veces mayor que el ritmo natural de desaparición de las mismas".
La organización Global Wildlife Conservation (GWC) pudo detenerse en esta problemática global, y lanzó una campaña para encontrar los 25 animales más buscados del planeta, entre los que se incluyen una tortuga gigante, un murciélago, una abeja, un periquito, un caballito de mar y un tipo de coral.
Ninguno de los miembros de la importante lista está oficialmente extinto, pero, colectivamente, las especies no han sido vistas en más de 1.500 años. "La tortuga gigante, por ejemplo, está en la más volcánica de las Islas Galápagos. Todo el territorio es un cono volcánico masivo, cubierto en matorrales casi impenetrables. Alguien podría caminar muy cerca de una tortuga de más de un metro al otro lado del arbusto y ni siquiera fijarse en ella", comenta Robin Moore, biólogo y líder del proyecto a el país.
Ignacio Jiménez Pérez, director de conservación en The Conservation Land Trust Argentina, explicó a Infobae que se considera extinta una especie cuando pasan varias décadas sin ser vista. Son los científicos expertos quienes se ocupan de revisar el estado de las mismas en determinadas regiones y anuncian esta noticia en publicaciones.
Pero mientras expertos anuncian este programa otros miembros de la comunidad científica consideran factible que algunas especies desaparecidas regresen en vida a poblar el planeta en un futuro inmediato.
La Fundación Long Now, cuyo lema principal es elevar la biodiversidad a través del rescate genético de especies en peligro o extintas, declaró que el ADN de muchas criaturas extintas está resguardado y conservado en especímenes de museo y fósiles. Sus genomas, luego de ser analizados, pueden ser transferidos a los genes de sus parientes más cercanos -el caso de los elefantes con los mamuts-, con el objetivo de devolverlos a su antiguo hogar en la naturaleza.
Dos equipos con la misma finalidad pero con diversos métodos científicos se disputan hoy la gran responsabilidad de preservación de miles de especies que componen el ecosistema humano. Sin dudas esta problemática preocupa a una gran porción del planeta, que entiende la importancia de que, cada ser vivo se desempeñan como agentes primordiales en la naturaleza como regulador del tamaño poblacional de las pequeñas y medianas especies de las que se alimentan. Tener en cuenta y respetar el rol que cumple y cumplió cada especie es uno de los ejes fundamentales a revisar tanto para el mundo científico como para cada uno de los miembros de la población humana.
Sábado, 29 de abril de 2017