HELADERIAS GRIDO
Sorpresa entre dueños y empleados
Un franquiciado y un trabajador de dos locales Grido aseguran que todas las compras y ventas son en blanco.
Miguel Restivo (67 años) es jubilado y desde hace nueve años tiene un pequeño local Grido en Monseñor Pablo Cabrera al 3100, Córdoba, con tres empleados.
“Me sorprendió eso que se dice de que la fábrica vendía el 50 por ciento en negro. A nosotros, siempre lo que nos vendió la fábrica y todos los insumos fueron con factura”, afirma.
Miguel remarca también que todas las ventas que ellos realizan son con ticket, y señala que la registradora del negocio tiene controlador fiscal.
Sobre el modo en que le otorgaron la franquicia, dice no conocer el tema porque lo manejó su socio.
Comenta que no han tenido ninguna comunicación con Helacor y señala que el último pedido lo recibieron “por suerte” el lunes y que con ese stock pasarán el fin de semana largo.
“Nosotros hacemos los pedidos por Internet y generalmente tenemos dos reposiciones por semana, y siempre todo es en blanco”, remarca.
Miguel cuenta que comenzó a trabajar desde los 15 años y pasó por diversos lugares y actividades. “Fui operador en LV3 desde 1960 a 1970, en la época de Víctor Brizuela y Sprinter; trabajé 10 años en Fiat y después tuve una distribuidora de galletas”, reseña.
No cree que Helacor pueda cerrar. Piensa y hace cálculos y advierte que, si eso ocurriera, con las más de mil franquicias en el país quedarían sin empleo directo más de cinco mil personas. “Es como si cerrara Fiat; muchísima gente quedaría sin empleo”, compara.
En otra heladería, en barrio Poeta Lugones, trabaja Alexis Fantini. Con 23 años, es casado y tiene una hija pequeña. Se inició en el mercado laboral hace cuatro años y medio. “Me sorprende esto, porque en este local toda la mercadería que traen es con factura,
y todo lo que vendemos es con ticket”, subraya. “Es muy sorprendente que digan que haya tanto en negro”, reitera. “Si se cae Grido, cae mucho personal y yo me quedo sin trabajo”, dice, preocupado.
Martes, 29 de mayo de 2012