POR SILVINA LAMAZARES
Y un día el rating volvió
Que la gente se volcó al cable. Que el público se inclinó por otras plataformas (tipo celular, tablet, esas cosas) para ver televisión. Que se acabaron las ideas. Que hay que renovar formatos. Que con una sola medidora no alcanza. Que la TV abierta estaba perdiendo por nocaut (un nocaut lento, paradójicamente).
Los números de los canales de aire no eran lo que fueron y las teorías sobre el decaimiento se viralizaron hasta ser tema de debate en los bares.
Probablemente los mismos bares que el lunes, con sus televisores encendidos, dieron por tierra la agonía del rating.
¿Querían rating? Ese misma noche, 51,4 puntos entre los dos programas más vistos. Como marco de referencia, el lunes de la semana anterior, los dos punteros apenas habían cosechado 32,5. ¿Qué pasó? La respuesta más clara sería “volvió Marcelo Tinelli”. Pero la resurrección va más allá de eso. O a caballito de eso.
Lo cierto es que el encendido de televisión abierta creció. Se sumó gente al baile, en el sentido metafórico y en el literal también. El regreso de ShowMatch (a las 22.30, por El Trece), con Bailando 2014 como plato fuerte, sacudió la modorra en la que estaban inmersas las planillas de Ibope en lo que va de este año. Salvo el batacazo de Avenida Brasil (iba a las 17), que desde las tardes solía ser el programa más visto de cada día, ninguna ficción local, y eso que hay buenas (como Sres. papis o Guapas), había logrado niveles interesantes de audiencia. El llamado ‘prime time’ (el horario central) estaba desconocido, con un pelotón de títulos entre los 11 y los 15 puntos... marcas que en otra época ameritaban un levantamiento por falta de rating.
Si bien después del súper lunes -en el que el debut de ShowMatch debió competir con el nuevo horario de Avenida Brasil (a las 22, por Telefe)- los números bajaron un poco (el martes, los dos primeros sumaron 48,2), las cifras siguieron siendo buenas. El primer día, el ciclo de Tinelli promedió 30,1 y, el segundo, 26,7. Por su parte, la tira brasileña conquistó 21,3 (muy por encima de lo que conseguía de tarde) y 21,5, respectivamente. Tan buenas mediciones, además, hicieron que sus antecesores también nivelaran para arriba: de hecho, en el arranque de semana Somos familia (a las 21, por Telefe) trepó a 15 puntos y Guapas (en su nuevo horario de las 22, por El Trece), a 16.
El tiempo dirá si estas mediciones vinieron para quedarse o son parte de una polvareda que depende de cómo sopla el viento. Por ahora, la brisa sirvió no sólo para que más gente vuelva al querido ritual de mirar tele en un tele, sino para demostrar que en este medio las teorías duran menos que un zapping.
Lunes, 5 de mayo de 2014