LA MADRE LOS DEJA SOLOS DE NOCHE Niños sufren abandono y las secuelas de la separación de sus padres Una exposición realizada en sede policial por Estela Mónica Jara sacó a la luz la preocupante situación por la que atraviesan dos niños, de 5 y 3 años de edad, cuya madre por las noches suele dejarlos absolutamente solos y encerrados en su casa. Desde donde siempre los vecinos escuchan sus llantos y quejas. La mujer se acercó voluntariamente a la Comisaría 1ra. de Paso de los Libres para dejar sentada una realidad de la que quienes habitan en calle Esteban Alisio entre Sitjá Nin y Bartolomé Mitre están al tanto. Relatando, además, que cuando la madre de los menores no sale, en su domicilio de Alisio 827 “suelen juntarse varias personas y tras ingerir bebidas alcohólicas generan ruidos molestos, puesto que están hasta el amanecer o altas horas de la madrugada”; y en varias de esas rees nocturnas estuvieron presentes los pequeños.
También manifestó que por ser madre se “solidariza con estas criaturas”, solicitando que una asistente social verifique la veracidad de sus dichos y considerando que “son muy chicos estos niños para que la madre los deje solos tanto tiempo por las noches”.
Detonante El texto de la exposición policial de Jara se hizo público la semana pasada a través de una emisora local y a raíz de ello se conocieron pormenores de un caso que involucra a una pareja que, ya distanciados de hecho, mantienen un litigio aún irresoluto por la Justicia. Pero lo cierto es que más allá de la separación de Daniel Peralta y Lumila Gauto, el trato que los pequeños recibirían en medio del conflicto estaría afectando notoriamente al nene de 5 años, y en menor grado a la nena de 4.
Esto se deduce de sendos informes elaborados por psicólogos y psicopedagogos de esta ciudad, los cuales coinciden en demostrar que el niño padece trastornos (inmadurez, problemas en el habla, no controla esfínteres), aunque no así su hermanita menor.
Por caso, la psicóloga clínica María Cristina Ermácora detectó en el pequeño un “notorio retraso madurativo, especialmente en el área del lenguaje hablado, que le dificulta la expresión y entendimiento con sus compañeritos del jardín”, refiriéndose al Nivel Inicial del Instituto Niño Jesús, donde concurre en el turno tarde.
La profesional aconseja que el menor “debe ser tratado por especialista y tener en su hogar una constante atención para mejorar y corregir su expresión”. Empero indica que la niñita “no manifiesta alteraciones ni retraso alguno”, que es “integrada, sociable” y que “intenta ayudar a su hermano mayor”. Además de que “ambos demuestran una excelente relación con el papá, quien los atiende cariñosamente”.
Régimen de visitas distinto Justamente es el padre, Peralta, quien manifiesta estar “conmovido” por el estado en que se encuentra su hijo y reclama a la Justicia mayor celeridad en la resolución de un régimen de visitas diferente, que le permita mantener un mayor contacto con los dos hijos que tiene con Gauto y a ellos con su hermanita de 8 años de edad, quien es hija del nombrado con una pareja anterior y vive con él.
El hombre, que también recibe atención psicológica y asesoramiento para la educación de sus hijos por parte de Ermácora, intenta que su ex mujer deje a los chicos con él cuando vaya a salir de noche, y así “evitar el sufrimiento de mis hijos, que lloran cuando su mamá no está y todos los vecinos escuchan”.
Ermácora sugiere un cambio en el régimen de visitas establecido hasta ahora, de 9 hs. a 15 hs., señalando que “no posibilita el vínculo de ambos (niños) con la hermana mayor, que vive con el papá y que va a la mañana a la maestra particular y en turno tarde a la escuela. Los tres se criaron juntos (…) compartían todo y de golpe, con la separación, no tienen posibilidad de contacto entre ellos.
Ya no hay comidas, juegos, noches compartidas. Los tres están siendo afectados por esta situación. Se extrañan, sueñan, no entienden el porqué de tanto dolor”, dice la psicóloga; quien recomienda “alternancia de una semana” en la permanencia de los pequeños en la casa de sus padres, de modo que “los vínculos se intensifiquen”.
Otra opinión Un informe confeccionado en diciembre de 2011, la psicóloga María Cecilia Rouvier Garay observó en el pequeño Peralta “un evidente retraso madurativo, en sus funciones visomotoras y del lenguaje correspondiente a su edad cronológica”, como así también “dificultades en el control del esfínteres, ya que ante situaciones estresantes el niño se orina y no manifiesta registrar lo sucedido comprobado durante la consulta mientras era interrogado sobre la actividades, juegos y castigos relacionados con su casa materna”.
La profesional detectó, además, “una negación constante para hablar respecto de todo lo referido a su vida personal, relación con la figura materna y otras personas con las que comparte su rutina; expresándose constantemente con ‘no sé’. Situación ante la cual en el momento de la entrevista se ha angustiado notablemente, manifestándose con temblores, golpes de puño y orinándose en la silla”.
Asimismo, según Rouvier Garay, el pequeño “presenta una idealización de la figura paterna, siendo al único que hace referencia de ser con quien comparte juegos, quien no se enoja y de quien puede hablar de manera relajada”. Amén de que se observó en él “mucha ansiedad y angustia respecto a su ámbito familiar, y mucha confusión en cuanto a al organización de su rutina diaria.
El niño ha realizado todas las actividades propuestas con una actitud colaboradora, aunque en algunos momentos reclamaba querer irse con su papá”, expresa la profesional. Al final, aconseja que el chico “continúe con atención psicológica, psicopedagógica y fonoaudiológica, esperando así poder superar la situación actual”. Y sugiere, asimismo, “que ambos padres inicien atención psicológica para recibir orientaciones con respecto a la crianza de sus hijos”.
Cabe consignar que en similar sintonía se manifestaron también las psicopedagoga Lorena Farinón -del gabinete psicopedagógico del Instituto Niño Jesús- y Carolina Daiana Baldi, quienes resaltan los conflictos suscitados de la falta de acuerdo de ambos padres en cuanto a la manera de criar y educar a sus pequeños vástagos.
Referencias:
FOTO 1: Asado en la casa de Alisio 827. Abundante y alcohol y el niño Peralta aparece a la izquierda, y su mamá más al fondo visitiendo blusa lila.
FOTO 2: Consumo de alcohol.
FOTO 3: El nene es involucrado en el baile de la botella.
(Por Mario Feu - Marketing Press) Lunes, 12 de marzo de 2012
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