Aún en actividad
Turismo Carretera, una pasión con historia
El Libro Guinnes certifica que es la categoría más antigua del automovilismo aún en actividad. El TC es sin duda una pasión argentina.
Los primeros pilotos del Turismo Carretera recorrían geografias virgenes, a lo largo y ancho de toda la Argentina, a bordo de verdaderas joyas mecánicas. Los años 30 maracron la confirmación de los Grandes Premios, magnificas competencias magníficas que se desarrollaban sobre miles de kilómetros uniendo al pais.
Gracias a esta federalización, el TC fue ganando simpatia en los poblados del interior del país, que se tomaban trascendencia gracias a la representación obtenida por algún piloto del lugar, o simplemente porque ese sitio era el paso obligado para abrir o cerrar alguna etapa de esas épicas competencias nacionales.
El piloto, la marca, el pueblo que apoyaba a su gran representante, tenía en el TC una caja de resonancia formidable para la época. Los relatos radiales, esos que inspiraron la imaginación de tantos jóvenes que cerraban los ojos para imaginar el paso raudo de sus ídolos; la tapa de los diarios; el vertiginoso andar de los autos acelerados aún más en las cintas cinematográficas de Sucesos Argentinos
El Turismo Carretera tiene fecha de nacimiento: el 5 de agosto de 1937. Aquel día, el Automóvil Club Argentino (ACA) organizó un Gran Premio que finalizó diez días después y que entonces estuvo reservado para tres categorías: Pista, Velocidad y Carretera. El primer ganador fue Angel Lo Valvo, detrás del seudónimo de "Hipómenes". Y desde entonces, la pasión se multiplicó por el país. Aceleró sobre las llanuras, desafió el calor norteño, corrió a la par de los vientos del Sur y aplastó la cordillera con su paso valiente y aventurero.
El país se dividió con un fanatismo por las marcas que no se registra en ningún otro lugar del mundo. Ford y Chevrolet era tan fuertes en la pasión popular como River y Boca, rivalidad que llega hasta nuestros días con otros nombres.
En 1948,sa realizó la Vuelta a la América del Sur, conocida tambien como la "Buenos Aires-Caracas". Más de 9000 kilómetros de vértigo y aventura. . Domingo Marimón, con un Chevrolet, se llevó una victoria que parecía de Oscar Gálvez y su Ford.
Aquellos largos recorridos fueron acotándose a circuitos semipermanentes ruteros. De a poco, ya a fines de los 80 y principios de los 90, los autódromos tomaron relevancia. La televisión y la seguridad llevaron al TC a reducir su espacio a los circuitos en detrimento de la ruta, que iba quedando de a poco a un lado.
A mediados de los 90 la actividad comenzó a transitar una era profesional, con grandes estructuras. Esa modificación significativa se produjo con el reingreso de Juan María Traverso en la categoría, en 1994, provisto por una estructura organizada y poderosa. Bajó el promedio de edad de los pilotos y la tecnología ganó en protagonismo.
Los Gálvez, Fangio, los Emiliozzi, Risatti, Perkins, Pairetti, Di Palma, Bordeu, Copello, Gradassi, Traverso, los hermanos Aventin, Mouras, Castellano, Ortelli y tantos otros nutrieron a una actividad única en el mundo.
El Turismo Carretera mantiene su vigencia y puede decir que vence al paso del tiempo. En 75 años permanece su pasión intacta. Y el gran orgullo de contar con el mejor motor, el que se impulsa con el fervor de su gente.
Fuente: Argentina.ar
Martes, 19 de marzo de 2013