Se modificó un esquema, se cambiaron nombres
River volvió a fallar en la gestación
Ramón apostó y perdió. Esta vez lo planificado no terminó siendo redituable ni productivo.
River cayó ante Newell's en Rosario y volvió a dejar una pálida imagen. Quizás no tan pobre como la que quedó luego del traspié con San Lorenzo, pero sí distorsionada con relación a lo que venía cosechando como local. Con un dato que no es menor, y es todo ese menjunje táctico que ensayó para ir a jugar al Coloso. Con cambio de sistema y de nombres. ¿Por qué tocar tanto a un equipo que venía ganando?

El Pelado Díaz no estaba conforme con lo que producían sus muchachos más allá de las victorias, está claro. Y no es una lectura equivocada, porque el Millo no exhibe un funcionamiento que refrende lo que la tabla de posiciones indica. Pero tantas variantes hablan de un malestar muy profundo, por un lado, y subliminalmente, refiriéndonos a Newell's, baja una idea de respeto desmesurado hacia el rival. Inclusive no deja de sorprender que futbolistas que juegan en la reserva pasen a ser titulares y viceversa.
Algunos que desaparecen de un plumazo, otros que ingresan pese a no figurar dentro del rubro de factibles, más un David Trezeguet que venía de marcar un gol ante Colón y que es relegado de los once. Hasta ahí una decisión entendible, pero que luego, con el equipo en desventaja, también fue dejado en el banco para darle una posibilidad a Rogelio Gabriel Funes Mori... Raro, muy raro, un tema que no debe dilucidarse por rumores sino por la palabra del propio entrenador.
La lectura del partido podrá orientarse para el lado que más le convenga a quien la realice. Por ejemplo, Ramón dijo estar muy contento por lo que hicieron sus jugadores. Quizás él allí esté ponderando que al equipo no lo pasaron por arriba y que mereció empatar. Además de intentar sostener sus decisiones tácticas. El técnico, ya desde la semana, no observaba con malos ojos traerse algo de Rosario. Por eso, quizás, la cercanía de conseguirlo haya sesgado en parte su análisis. La otra visión podría ser algo más pragmática. Se modificó un esquema, se cambiaron nombres y River volvió a fallar en la gestación del juego. Inclusive, con un sistema más defensivo perdió el encuentro con un pelotazo de cuarenta metros, entre los centrales y con un gol de alguien que, por palabras del propio Ramón Díaz, debían tener mucha atención para contenerlo. Es decir que, independientemente de algunas cosas positivas, el Millo repitió errores y flaqueó nuevamente como visitante.
Ahora quedó más lejos de la punta y a medida que pasan las fechas y las equivocaciones se tornan recurrentes, los interrogantes se vuelven más importantes. Todavía tiene chances de pelear arriba, es indudable, pero deberá revisar algunas cuestiones. Una de ellas es que, ante dos compromisos complicados, no pudo sumar. Se vienen Vélez y Racing en el horizonte, es momento de dar un efectivo golpe de timón.
Lunes, 18 de marzo de 2013