En el barrio Pío X de Corrientes
Crece la tensión
No cesa la bronca de la gente en el barrio Pío X, donde vivía Omar Cosio, el muchacho que murió en una celda de la Comisaría Séptima. Los familiares de Cosio, incluso su propio padre, negó vinculación alguna de los revoltosos que cortaron la calle, se enfrentaron con la Policía y hasta intentaron saquear un negocio el domingo por la tarde. Pero, de acuerdo a información surgida en el propio barrio, la situación aún no está esclarecida y aseguraron que tomarán otras medidas por el descontento.
La gente, muchos amigos y conocidos del mencionado Cosio (que tendría problemas con la droga y era conocido en su conducta delictiva robando carteras) tomó éste caso como ‘la gota que colmó el vaso’, ya que son innumerables las quejas por intervenciones violentas de personal de la Comisaría Séptima, las cuáles siempre terminan con chicos detenidos (sobre todo menores) y golpeados en dicha repartición.
“No estamos tranquilos. Acá puede pasar cualquier cosa. Los muchachos se están organizando y no descarten que esta noche hagan quilombo (sic)”, dijo una mujer que conoce en detalle como se movilizan los violentos en la zona de Mendoza casi Teniente Ibáñez.
Esa misma mujer aclaró que “lo de Omarcito fue el detonante
En los comentarios que acompañan la noticia en los portales informativos de Corrientes, son muchos los testimonios que hablan de la movida en la zona.
Ante ello, entrada la tarde del lunes, la Policía decidió fortalecer su presencia en la zona, enviando nuevos efectivos al lugar. Se duplicó el número de agentes en el comercio de dueños chinos, que habría sido el primer lugar ‘apuntado’.
Palabra del padre
“Mi hijo el día antes me contó que le pegaron a la noche. Fui a hablar con el oficial a cargo, y me dijo que fueron los vecinos los que le pegaron, y no los policías”, contó Pedro Cosio, padre del joven muerto.
Se recuerda que el muchacho, con evidentes signos de estar drogado, intentó robar a una mujer lo cuál originó la reacción de vecinos que lo detuvieron. Para la Policía, fueron éstos quienes lo golpearon en su accionar.
“Mi hijo me aclaró que le pegaron ahí adentro, en la comisaría. Que le hicieron cualquier cosa. No creemos lo que dice el informe. La autopsia no está completa. No se sabe todavía lo que pasó. Los estudios siguen dos o tres días más, y la causa está abierta. No descartamos nada. Queremos aclarar que mi hijo no era un delincuente. El no estaba en sus cabales cuando lo arrestaron. Él era adicto. Tenía problemas con adicciones. Estaba saliendo, pero ese día se perdió. Pero estaba en nuestro control. No era peligroso”, dijo.
Lunes, 11 de marzo de 2013