Duelo argentino en el Lawn Tennis
Nalbandian busca las semifinales del ATP de Buenos Aires
El cordobés se medirá esta tarde ante su compatriota Carlos Berlocq, en otro duelo entre argentinos. “Será un partido muy difícil”, aseguró el cordobés tras ganarle ayer a Mónaco por 6-3 y 6-1, en un encuentro en el que mostró su mejor tenis.Nalbandian, 85 en el ranking mundial de la ATP, consumó ayer su victoria sobre Mónaco (20) en una hora y 28 minutos, y generó la gran ovación de la noche en el Buenos Aires Lawn Tennis Club, que por primera vez estuvo repleto y hasta lució en su puerta de acceso el cartelito de "entradas agotadas".
Nalbandian, con un rendimiento de menor a mayor, inició su camino con un triunfo en la ronda inicial sobre el estadounidense Wayne Odesnik (107), hoy se quitó de encima a Mónaco y mañana irá en busca de las semifinales ante otro argentino, Carlos Berlocq.
Berlocq (43) generó la primera gran sorpresa del torneo al vencer previamente al francés Gilles Simon (12) por 6-2 y 6-1.
El "duelo" entre los dos singlistas del equipo de Copa Davis de la Argentina que venció hace 11 días a Alemania, en Bamberg, tenía antecedentes favorables a Nalbandian por 2-1, tras haber vencido a Mónaco en Indian Wells y Munich, ambas veces en 2005, mientras que perdió en la edición 2008 del ATP porteño.
Si bien el tandilense había dejado una buena impresión en su presentación con triunfo ante el italiano Filippo Volandri (56), esta no fue su noche, ya que lució contenido y por demás errático, quizás intimidado por la imagen del "Rey David", admirado hasta por sus propios compañeros de equipo.
El cordobés marcó la cancha de entrada con un quiebre de servicio que lo puso 1-0 arriba y luego dominó a su antojo, con la táctica de no jugar dos pelotas iguales, mucha profundidad y buenos ángulos, un plan que le salió a la perfección, ya que Mónaco no encontró la forma de contrarrestarlo.
Nalbandian le buscó el revés al tandilense, cargó el juego ahí para después definir cómodo -preferentemente sobre la derecha- y así se llevó set inicial con otro quiebre más que le permitió cerrar por 6-3.
En el inicio del segundo parcial se vio lo mejor del cordobés y lo peor de Mónaco, cóctel que permitió al de Unquillo ponerse 3-0 arriba y encaminar el triunfo.
Mónaco cometió errores no forzados propios de un principiante con su derecha, sacó flojito y eligió mal cuando atacar, lo que agrandó a Nalbandian, quien agudizó las fallas de su rival y mostró la calidad enorme de su mano, sobre todo en el quinto punto, en el que se floreó y pasó al frente por 4-1.
El unquillense, dueño absoluto de la noche, logró otro quiebre más, se adelantó 5-1 y después sirvió cómodo, sin vacilar, para concretar un por demás elocuente 6-1.
El cruce entre los dos campeones de Buenos Aires, Nalbandian en 2008 y Mónaco en 2007, quedó en manos del cordobés, quien impuso su mayor categoría, dio un pasito más en busca de la final del domingo y se llevó otra ovación, una más de su gente, con la que mantiene un idilio eterno desde su compromiso inclaudicable con la camiseta argentina, de la que es el más digno exponente.
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Viernes, 24 de febrero de 2012