Miguel Del Sel insultó a la presidenta
Fue criticado y salió a pedir disculpas
El ex candidato a gobernador santafesino por el PRO participó de la obra teatral de Jey Mammon en Carlos Paz y profirió una catarata de descalificaciones y dijo que "se le fue la mano". Enojo del kirchnerismo. El líder de PRO en Santa Fe, Miguel del Sel, quedó envuelto en una polémica luego de un fuerte insulto a la presidenta Cristina Kirchner, que motivó el repudio del arco kirchnerista y por el cual debió pedir "disculpas".
El ex candidato a gobernador participó de la obra teatral de Jey Mammon en Carlos Paz, y allí se soltó para hablar de política, contexto en el cual no dudó en calificar como sus "enemigos" a los referentes del oficialismo, aunque mencionó directamente a la presidenta, al senador Aníbal Fernández "y a esos chicos que se están llevando todo".
El avión y Skanska. "Queda un país muy rico. Lo que pasa es que cuando hacen su primer vuelo en avión se dan cuenta de todo lo que hay abajo y se lo empiezan a llevar... Ya pesificaron la cuenta, lo de Skanska quedó ahí", señaló primero el ex integrante del trío Midachi. En ese tono continuó: dijo que no tomaría un café con la jefa de Estado porque si fuera a su despacho "le diría de todo" y ejemplificó con un chiste que hace en su obra teatral, con un fuerte insulto hacia la jefa del Estado.
Contó que en su comedia está tomando una sopa de letras y su hijo le patea el plato y le queda escrito en la frente "vieja chota hija de puta", tras lo que ironizó: "Así que si voy con la presidenta podría tomarse un buen plato de sopa de letras y yo le pateo el plato. Le puedo dejar escritas bastantes cosas en la cabeza".
En medio del fuerte repudio de dirigentes de todos los sectores del kirchnerismo, poco después Del Sel le pidió "disculpas" a la mandataria por el exabrupto y reconoció que se le "fue la mano" con "un chiste de mal gusto".
"En primer lugar pido disculpas a la presidenta y a las mujeres que se hayan podido sentir ofendidas. Quiero aclarar que ante una pregunta, respondí con un ejemplo de un chiste que hacemos en el teatro", sostuvo Del Sel y remarcó: "En la obra no está dirigida a Cristina sino a un personaje, y el objetivo es hacer reír".
Luego, y a través de un comunicado, el dirigente macrista agregó: "Reconozco que se me fue la mano pero no fue más que una declaración desafortunada, y como me enseñaron de chico, cuando uno comete un error debe saber pedir perdón. Los que me conocen bien saben que lo hago con humor; no es mi estilo ofender ni insultar a nadie, y que estoy en total desacuerdo con la violencia verbal que vive la política actual en la Argentina".
"Reitero mi pedido de disculpas a la investidura presidencial, y sigo apostando al diálogo permanente para solucionar los problemas de los santafesinos y construir entre todos un país mejor", completó.
Poco antes, el presidente del bloque kirchnerista en la Cámara de Diputados, Agustín Rossi, le había pedido a Del Sel que se rectificara "inmediatamente".
Por su parte, la ex diputada de Libres del Sur Cecilia Merchán anticipó que presentará una denuncia en la Justicia ya que se trata de una "violación" a ley de violencia de género, teniendo en cuenta que en la entrevista Del Sel comentó que consumió prostitución "hace no mucho" y que "por 400 pesos hay chicas lindas".
"Nadie le pide que deje de lado sus críticas: pero puede hacerlas en el marco del respeto, sin insultar a nadie. Aunque Del Sel no la haya votado, Cristina es la presidenta de los 40 millones de argentinos", destacó Rossi. Agregó que el referente del PRO "no hizo un chiste ni una crítica" y que "sus dichos provocan indignación y son absolutamente repudiables", ya que "no sólo agredió a la presidenta sino a todas las mujeres argentinas. Una vez más demuestra que detrás de un ropaje buena onda en realidad se esconde una personalidad agresiva, machista, antidemocrática, que no es capaz de expresar una crítica sin recurrir a este tipo de violencia".
Su par Edgardo Depetri señaló que las declaraciones de Del Sel "muestran la verdadera cara de la derecha argentina organizada en el macrismo" y sostuvo que "semejante insulto expresa los límites de la política-farándula, que compra figuras sin contenido formadas al calor de las corporaciones mediáticas y la infame década de los 90 para, detrás de ellas, esconder las verdaderas intenciones de la derecha argentina: la destitución de Cristina y la restauración conservadora". Una polémica instalada pese a la desmentida del ex candidato a gobernador.
Jueves, 31 de enero de 2013