FATPREN
El presidente Milei ataca la libertad de expresión y el derecho a la información para encubrir los resultados de sus políticas
Desde el comienzo de su mandato, el Gobierno nacional dejó en claro su hostilidad al trabajo de la prensa, con la suspensión de la Pauta Oficial, las limitaciones inéditas en la cobertura de actos oficiales, la intervención de los medios públicos y la represión a trabajadores de prensa durante el tratamiento de la Ley Ómnibus.
Luego intentó avanzar con el cierre ilegal de la Agencia Télam sin pasar por el Congreso, cuyos trabajadores resisten con un acampe que supera el mes, y el silenciamiento de TV Pública y Radio Nacional que, por primera vez en democracia, no pudieron informar sobre el Día Nacional por la Memoria, la Verdad y la Justicia que conmemora el golpe genocida.
Ahora, en una nueva escalada, el mandatario agredió a una periodista por declaraciones realizadas durante una entrevista, deseó la quiebra de un grupo de medios que dejaría a 630 trabajadores en la calle y, más grave aún, publicó un extenso texto plagado de agravios y ataques a la labor periodística.
Milei habla de “una libertad de expresión para todos” pero su ataque a los medios de comunicación y a la tarea de prensa sólo socava el verdadero derecho a la información para la población y, por tanto, de una verdadera libertad de expresión. En el mismo sentido, afirma que “nadie puede evitar que hablemos”; lo invitamos a que lo haga en todos los medios, no solamente en los que él elija.
Esta nueva arremetida contra la prensa se da mientras se conoce que el presidente se informaba con un bot de precios de supermercados de la red social X que, en realidad, era falso. Ésta es la demostración más cabal que el reemplazo de lxs trabajadorxs de prensa por plataformas digitales sin regulación alguna termina en una multiplicación escandalosa de la información falsa, en la que cae el propio gabinete nacional.
Todo esto ocurre en el marco de un fuerte ajuste sobre la población con una inflación superior a los dos dígitos mensuales, aumentos de tarifas, suspensión de la ayuda a comedores, despidos masivos de estatales y salarios que quedaron en su mayoría bajo niveles de pobreza. Es inocultable que el gobierno quiere atacar a la prensa para evitar que se informe sobre la dramática situación que se está desarrollando en el pueblo producto de las políticas oficiales.
Llamamos al presidente Javier Milei a cesar sus agresiones a la prensa, que además son caldo de cultivo y validan futuros ataques a trabajadores de prensa, y a respetar la labor periodística. Lo convocamos también a que cumpla con sus obligaciones de funcionario público y denuncie en la justicia los actos de los que tuviera conocimiento que pudieran constituir un delito.
Rechazamos la censura en los medios públicos y el intento de cierre de la Agencia Télam.
Por el respeto irrestricto al Estatuto del Periodista Profesional y los Convenios Colectivos de Trabajo.
Por salarios por encima de la línea de pobreza. Investigación y castigo de los responsables de la represión a trabajadores de prensa.
Domingo, 14 de abril de 2024