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Beltrán, el as bajo la manga de Demichelis
El 9 demostró ante Lanús que tiene condiciones para ser el único delantero del equipo mientras el DT intenta aumentar la solidez defensiva y equilibrio.
Así como existe el antiguo dicho de que “se hace camino al andar”, en el fútbol está más que probado que “el equipo se hace al andar”, con el correr de los partidos. La experiencia de Demichelis genera que el entrenador de River tenga muy clara esta realidad. Y con Lucas Beltrán sucede lo mismo, aunque principalmente por su voracidad competitiva, capacidad evolutiva y confianza en sus cualidades de delantero. Por eso, con su golazo determinante ante Lanús, el cordobés confirmó está en condiciones de ser una carta ofensiva clave para DT: unas Lucas en la manga.
Beltrán puede brindarle una solución ofensiva a Micho en un circuito ofensivo que aún se muestra verde y con escasa intensidad. Si bien la prioridad de MD es acomodar las piezas de atrás hacia adelante para que el equipo gane equilibrio, como quedó en evidencia en el planteo ante Lanús, en el que utilizó un 4-4-1-1 con Rondón de único punta, el Vikingo reúne características más compatibles que el venezolano y que el colombiano Borja para este esquema.
Primero, por la energía física de su juventud, la intensidad y agilidad natural para explotar los espacios con diagonales o piques verticales y su calidad técnica para resolver en espacio reducidos, como en la maniobra del 2-0 en La Fortaleza. También, por su ductilidad y dinámica para asociarse el circuito creativo y romper la previsibilidad de los ataque. Mientras que la otra virtud de LB18 en comparación con Borja y Rondón es la presión que ejerce sobre los defensores rivales en la salida, un trabajo que Demichelis considera clave. “Me pide movilidad y que vuelva locos a los defensores”, contó Beltrán luego de la victoria frente a Lanús.
Claro que el físico (1,76 metro y 77 kilos) las características del cordobés no le permiten ser el faro de referencia que área que pretende el deté y que pueden aportar Borja (1,84 y 89 kilos) y Rondón (1,89 y 90 kilos). Aunque el colombiano y el venezolano no cuentan con la movilidad del Vikingo, como tampoco con el ADN de River ni con el conocimiento del club que tiene Lucas.
Beltrán apenas había jugado 13 partidos y festejado un gol cuando fue cedido a préstamo a Cólón. En Santa Fe logró su explosión y se consolidó en Primera (con seis goles en 39 partidos), lo que generó que Gallardo apostara por él y que en Núñez negociaran su retorno con el Sabalero para que pudiera estar en los octavos de la Libertadores 2022 vs. Vélez.
Evidentemente, su regreso a River le costó más de lo esperado y las incorporaciones del Colibrí y Rondón lo relegaron a ser el tercer nueve del equipo de Micho, una posición que está empezando a revertir y una tendencia que puede potenciar el miércoles ante Racing de Córdoba por los 32avos de la Copa Argentina, ante Racing de Córdoba. De hecho, en el entrenamiento del domingo Demichelis lo puso como socio de ataque de Borja en el 11 que jugó frente a la Reserva.
De esta manera, con la paciencia que exige su juventud y con la referencia constante de su amigo Julián Álvarez, Beltrán se enfoca en seguir sumando condiciones, y fundamentalmente goles, para convencer al deté de que puede ser el centrodelantero que mejor encaje con la identidad futbolística que el equipo todavía no encontró con regularidad en el ciclo de MD.
Lunes, 6 de marzo de 2023
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