se convirtió en una obra de culto
Los secretos de "La Mary", la película que unió a Susana Giménez con Carlos Monzón
Todos los detalles del filme de Daniel Tinayre, que comenzó con un escándalo y se convirtió en una obra de culto.-Se estrenó el 8 de agosto de 1974, hace 45 años, en las salas porteñas Atlas y Callao. Y volvió a los cines remasterizada en octubre de 2014. Para entonces, su protagonista femenina, Susana Giménez, ya se había convertido en la gran diva argentina.
Y su galán, Carlos Monzón, hacía rato que había fallecido. Sin embargo, La Mary siguió inquietando al público con su tragedia y erotismo.
"La película era erótica. Aún me da vergüenza", decía Susana al ser consultada sobre el reestreno del filme que marcó un antes y un después en su carrera. Es que, hasta ese momento, Susana era conocida como modelo publicitara y había comenzado a destacarse en el teatro de revista. Pero nadie podía imaginarla en el rol de actriz dramática. Nadie, excepto Daniel Tinayre.
El cineasta de origen francés tenía entre sus manos una novela de Emilio Perina muy difícil de llevar a la pantalla grande. Y no sólo por las escenas de sexo y desnudez que incluía y que chocaba de lleno con los pruritos de la época, sino también por los cambios emocionales que debía experimentar su personaje principal.
El libro, incluido en una serie del autor llamada "Historias Apasionadas", en la solapa de su primera edición -publicada en 1965 por editorial Stilcograf-, rezaba: "La Mary es un profundo estudio psicológico, denso y prolijo como un informe destinado a un psicoanalista".
Lo que pocos saben, sin embargo, es que fue la misma Susana la que le propuso hacer esta película a Tinayre. "Me llamó un día por teléfono y me dijo: 'Daniel, tenemos que hacer algo juntos, quiero que me dirijas y te mando un libro para que lo leas'. El libro era La Mary. Lo leí, le vi la punta y empecé a pensarlo en términos de cine: lo di vuelta para arriba, para abajo, para los costados. Hasta que, finalmente, junto con Augusto Giustozzi y José Martínez Suárez encontramos la fórmula adecuada y lo transformamos en un guión que sigue exactamente a la novela", había confesado el director en una entrevista.
Así fue como Susana, que por entonces lideraba la taquilla con "La Revista de Oro 18 Kilates" junto a Jorge Porcel, en el Teatro Astral, quedó confirmada como protagonista del filmr. Lo más curioso, sin embargo, fue la elección de su compañero, ya que para el papel del Cholo en lugar de convocar a un actor llamaron a Monzón.
En ese momento, el boxeador había llegado a lo más alto de su carrera pugilística y su fama internacional era incuestionable. Por lo tanto, a pesar de que no tenía ningún conocimiento de actuación, Tinayre entendió que era la persona indicada para el papel. En el libro original, el Cholo era alto y rubio. La única coincidencia con Monzón era que también boxeaba. Y eso bastó para que el personaje fuera suyo.
El contrato fue firmado en Almorzando con Mirtha Legrand, el programa de la esposa de Tinayre, el martes 18 de diciembre de 1973. Y allí se aseguraba que Monzón había sido elegido por su physique du rôle, luego de que se hubieran descartado varios nombres, y no porque su fama garantizara la venta del filme al exterior.
Héctor Cavallero, por entonces pareja de Susana, fue uno de los productores asociados del film junto a Ricardo Tomaszewsky y Guillermo Cervantes Luro. Y, a fines de 1973, convocó a la prensa para anunciar el comienzo de rodaje de la película y la definió como una "superproducción", asegurando que el presupuesto era de "200 millones de pesos", aunque finalmente terminó
costando 360 millones.
Así, luego de que Monzón defendiera su título en París frente al mexicano José Mantequilla Nápoles el 9 de febrero del 74, comenzó la filmación que duró doce semanas y terminó el 12 de junio de ese año. La historia, que en la novela original no tenía fecha cierta, fue situada entre los años 1930 y 1942. Y el rodaje se dividió entre los estudios San Miguel y la Isla Maciel, dónde se realizaron las tomas de exteriores.
"El éxito de La Mary fue simplemente haber reunido al campeón del mundo que era Carlos Monzón en ese momento junto a una vedette como Susana Giménez", había dicho Tinayre. Pero, a decir verdad, gran parte de la repercusión que tuvo el film estuvo relacionada a la historia de amor que nació entre sus protagonistas en medio del set.
El mito que circuló durante años, decía que en las escenas de sexo, cuando Tinayre daba la orden de finalizar el boxeador y Susana seguían haciendo de las suyas. Se llegó a decir, incluso, que tras el rodaje de la noche de bodas, en la que la Mary y el Cholo tienen su primera vez, Monzón le pidió a los gritos a los pocos técnicos que habían quedado para el rodaje: "Ahora se van todos y me dejan en paz". Y que, luego de esto, volvió a abalanzarse sobre la Giménez.
Sin embargo, en declaraciones recientes, la diva aseguró que esta historia no era verídica. "Me dio un beso, el director dijo 'corte' y nosotros seguimos un poco más. Pero yo nunca podía haber hecho lo otro, me daba vergüenza, estaba todo el mundo", aseguró.
Por aquel entonces, Monzón estaba casado con Pelusa y, cuando empezaron los rumores sobre su relación con Susana, muchos pensaban que no se trataba más que de un affaire. Sin embargo, la pareja permaneció unida durante cuatro años, en los que ilustraron varias portadas de revistas.
"Le di las gracias por lo mucho que me ayudaba en la película, le dije que era un fenómeno… y le fui de frente: 'Mi matrimonio estaba terminado antes de conocerte y estoy enamorado de vos'. Me miró, se mordió los labios y se le llenaron los ojos de lágrimas… Me dijo que la nuestra podía ser una linda historia de amor y… apagamos la luz. Fue una noche inolvidable, de locos. A partir de ahí empezó el escándalo", recordó el boxeador en una entrevista, mucho tiempo después.
El romance entre Susana y Monzón, quien luego fuera condenado por el femicidio de Alicia Muñiz, terminó abruptamente cuando la diva sufrió violencia por parte del boxeador y decidió abandonarlo. Sin embargo, la película en la que se conocieron se convirtió en una obra de culto que, al día de hoy, sigue siendo admirada por los estudiosos del séptimo arte de todo el mundo.
Sábado, 31 de agosto de 2019