"FUE VICTIMA DE LA DESIDIA SOCIAL"
Padres del joven que se mató tras acusaciones de abuso
Agustín Muñoz tenía 18 años y se quitó la vida luego de que una amiga asegurara que había sido violada por él. Las capturas de WhatsApp entre los dos jóvenes fueron publicadas y en ellas se puede leer cómo la chica reconoció que había mentido. Sin embargo, no fue suficiente para Agustín.
Agustín Muñoz tenía 18 años cuando tomó la drástica decisión de quitarse la vida luego de que su mejor amiga lo escrachara en las redes sociales y lo acusara por una falsa violación.
Sus padres grabaron un video para que sea difundido en las redes sociales donde le piden a la “sociedad y a los adultos que dejemos de exponer a nuestros chicos, dejemos de utilizarlos como armas cuando ellos están vulnerables. Si queremos construir una sociedad, tenemos que construirla con herramientas para subsistir en este mundo”.
Su mamá, Silvina Castañeda, quien tomó la palabra en el video, asegura que su hijo tomó la decisión de suicidarse tras no haber “recibió la contención suficiente de la sociedad. Como representante de mi hijo pido, sin echarme en contra la lucha leal y firme de tantas víctimas de abuso y de falta de justicia, que se tome conciencia de que estamos jugando con algo muy delicado, estamos hilando fino y exponiendo a nuestros jóvenes, estamos juzgando a los jóvenes cuando nosotros somos responsables de la sociedad que estamos construyendo”.
“No hay contención, no hay fundaciones, no hay herramienta que los oriente, los ayude. Una vez que ellos abren esa puerta, esa verdad, muere ahí. Mi hijo fue una víctima de la desidia social que tenemos como ciudadanos y como adultos”, aseguró.
"No podemos defender el escrache"
La práctica del escrache estuvo en el centro de la polémica cuando se discutió en torno a la denuncias del productor teatral, Omar Pacheco, y el actor Juan Darthés. Sobre esto, la antropóloga Rita Segato explicó que si las feministas, en términos históricos, “hemos defendido el derecho al justo proceso, no podemos defender el escrache. Tiene que haber un derecho a la interlocución con el acusado, si no estamos cayendo en los mismos funcionamientos de aquellos que consideramos ser nuestros antagonistas de proyecto histórico. Yo no quiero un cambio de manos del poder, de la capacidad de opresión, de la reducción del otro mediante la burla y el escarnio: estamos luchando por un mundo diferente, no por un mundo igual en otras manos”.
Domingo, 30 de diciembre de 2018