TRABAJABA DESDE 2011
Agente de Prefectura oriundo de Itatí reconoció ser un narco
Se trata de Javier Oscar Alegre Aranda, de 27 años. En febrero de 2016 lo detuvieron en Entre Ríos. Manejaba una camioneta cargada con 258 kilos de marihuana.
Admitió su responsabilidad y bajo la figura del “arrepentido” dio datos para llegar a otros delincuentes.
Un suboficial de la Prefectura Naval Argentina (PNA), oriundo de la localidad correntina de Itatí, reconoció ser un narcotraficante durante un juicio abreviado en el cual lo condenaron a la pena de 5 años de prisión. Además, bajo la figura del “arrepentido”, brindó datos para llegar a otros delincuentes.
El agente de la PNA, quien sería exonerado de la fuerza a partir del fallo judicial reciente, transportaba 258 kilos de marihuana desde el mencionado poblado de Corrientes rumbo a la provincia de Buenos Aires. Sin embargo, fue apresado en febrero de 2016 en un control caminero dispuesto por Gendarmería Nacional Argentina (GNA) sobre la Ruta Nacional 14, en la provincia de Entre Ríos.
En el Tribunal Oral Penal de la ciudad de Paraná dieron a conocer el viernes la sentencia que recae en Javier Oscar Alegre Aranda, de 27 años. De esta manera finalizó el trámite judicial iniciado en el marco de una causa caratulada como “transporte de estupefacientes agravado por tratarse de un funcionario público encargado de la prevención de tal delito”.
En el “Acta para Juicio Abreviado”, el prefecturiano “reconoció su responsabilidad en el hecho” como autor del delito del que estaba imputado. Así, al reconocer su autoría obtuvo un “beneficio” de morigeración de condena.
La pena le fue reducida en parte porque Alegre Aranda colaboró y aportó datos que permitieron el secuestro de droga en otras causas que estaban en trámite en la Justicia Federal.
De hecho, la fiscal que tramitó la causa, Milagros Squivo, reveló que el prefecto aportó nombres y funciones de las personas que integraban la organización que lo contactó para realizar el viaje en el que resultó detenido, e incluso dio datos que permitieron desarrollar recientes operativos en Corrientes donde se secuestraron grandes cantidades de droga.
“El procesado fue interrogado sobre si reconocía, si admitía voluntariamente su participación responsable, si era consciente de que tal reconocimiento le implicaba aceptar una sentencia condenatoria, a todo lo cual respondió afirmativamente”, señala el fallo del TOP de Paraná al cual accedió diario época.
La captura del agente de PNA sucedió el 19 de febrero de 2016 a las 18 en la localidad entrerriana de Concordia. Allí, durante un control de rutina en el cruce de la autovía Gervasio Artigas (ex Ruta Nacional 14) y la Ruta 18 que conduce a la capital entrerriana, los gendarmes del Escuadrón 4 advirtieron que una camioneta Toyota Hilux redujo sospechosamente la marcha cuando divisó el operativo.
Luego el conductor frenó a un costado de la banquina. Entonces los gendarmes le pidieron la documentación correspondiente. Alegre Aranda exhibió papeles de seguro vencido y la cédula verde a nombre de su abuela, propietaria del rodado.
El joven también mostró una tarjeta de PNA y dijo que prestaba servicio para esa fuerza en la Villa Zavaleta del barrio porteño de Barracas. No obstante, ya estaba en disponibilidad preventiva porque su legajo ya estaba “manchado” ante episodios de conducta violenta.
La inspección al vehículo arrojó el hallazgo, en doble fondo y debajo de los asientos delanteros, de los 258 kilos de marihuana distribuidos en 350 “ladrillos” que habría cargado en Itatí.
(Epoca)
Lunes, 24 de abril de 2017