HOMBRES por Alejandra Stamateas
Lo que ellos piensan del sexo… Y no es verdad
Hay mitos de los hombres que muchas mujeres compartimos. ¿Ellos tienen más “necesidad” que nosotras? ¿Hay que llegar juntos al orgasmo? ¿La pornografía es terreno masculino? Todas las verdades.
Hay algunos mitos que por años hemos creído las mujeres, o nos los hicieron creer:
“Los hombres tienen más necesidades sexuales que las mujeres”
FALSO. ¡Esto es mentira! Lo que sucede es que culturalmente al varón siempre se le ha permitido tener sexo, porque un varón que no tiene sexo es considerado raro y si tiene mucho sexo es un piola bárbaro. Pero a la mujer que tiene mucho sexo se la llama de muchas y malas maneras.
“La pornografía es para hombres”
FALSO. En una encuesta se preguntó a muchas personas qué era lo que más las excitaba. Los hombres contestaron que eran las películas pornográficas y las mujeres dijeron que preferían ver cuerpos desnudos pero en escenas románticas. Los investigadores decidieron probar si es verdad y analizaron sus reacciones. Resultó que esas mujeres también se excitaban con películas pornográficas, pero mientras sus cuerpos decían “sí”, sus mentes decían “no”. Fisiológicamente las mujeres tenemos las mismas necesidades que los hombres, pero la mayor complicación está en nuestra mente.
“Hay que llegar al orgasmo simultáneo”
FALSO. Es erróneo pensar que la pareja se lleva bien sexualmente cuando los dos llegan al orgasmo al mismo momento. Es un mito. En una encuesta se descubrió que sólo el 25 % de las mujeres alcanzan el orgasmo a través de la penetración: el 75% necesita estimulación del clítoris. Una mujer puede ser anorgásmica por no conocer que tiene un clítoris o si su pareja no lo estimula porque busca su propio placer. Si a esto le agregamos el mito del “orgasmo simultáneo”, el conflicto es mayor.
“El hombre sabe todo lo que a la mujer le gusta”
FALSO. El hombre no es adivino y tampoco es el semental que sabe todo. Tal vez no sea tan experimentado como dice ser y, aunque lo sea, cada mujer es diferente de las otras. Y ellos necesitan saber qué es lo que a una le gusta y qué no. De la misma forma en que ellos deben expresarle a su pareja lo que esperan de ella. Necesitan hablar y comunicarse, entenderse para después amarse.
La clasificación pertenece al psicólogo y sexólogo Bernardo Stamateas y fue publicada en el libro “Estoy casada pero me siento sola” de Alejandra Stamateas, licenciada en teología, docente, conferencista y escritora.
Sábado, 31 de agosto de 2013