EL DESESPERANTE TESTIMONIO DE UNA MUJER GOLPEADA
“Parece que están esperando que me mate”
Laura Aranda contó “el infierno” que vive junto a sus tres hijos desde que se separó de su marido hace cinco años. El lunes pasado la golpeó en la calle. Lo denunció muchas veces. “Yo no puedo salir sola, no salgo a ningún lado sin la compañía de mis hijos o familiares porque tengo miedo, porque él me amenazó de muerte”. La mujer apuntó a la falta de accionar policial y también a la lentitud de las autoridades judiciales en tales casos, cuando está en riesgo una vida.
El relato de Laura Aranda, una mujer de 42 años que aseguró estar padeciendo hace cinco “un infierno” en su propia casa por parte de su ex marido y padre de sus hijos, trae a la memoria el lamentable desenlace del caso en el que un hombre degolló a sus tres hijastros en 2011, luego de que la mujer lo había denunciado infinidad de veces por violencia familiar. Aquel hecho ocurrió en el barrio Lomas del Mirador y tuvo trascendencia nacional.
Laura dialogó ayer con época y contó que debió abandonar días atrás su hogar tras recibir una fuerte golpiza en la calle por parte de su ex marido, quien, según contó, la amenazó de muerte en varias oportunidades y por ello lleva radicadas más de 10 denuncias contra él en la Policía.
“Hace cinco años comenzó todo, cuando nos separamos porque él se fue de la casa con otra mujer y a partir de ahí hice la denuncia de abandono de hogar, luego el caso paró en el Juzgado y una juez determinó a través de un convenio que debíamos convivir en la misma casa a pesar de estar separados. Desde ese momento yo y mis hijos vivimos en un infierno”, relató la mujer.
Ella es empleada doméstica y tienen en común tres hijos, una mujer de 16 años y dos varones de 20 y 22. “Desde el martes pasado no me estoy presentando a trabajar y estoy desesperada. Ya no sé qué hacer, parece que están esperando que me mate”, expresó Laura mientras mostraba la fotografía de cómo quedó tras los golpes que le habría propinado su ex pareja el pasado lunes 6 en plena vía pública.
La mujer apuntó a la falta de accionar policial y también a la lentitud de las autoridades judiciales en tales casos, cuando está en riesgo una vida.
Según contó, el hombre “no deja de hacerme la vida imposible a mí y a mis hijos, los amenaza de que si están a mi favor se vayan de la casa. Sin ir más lejos hoy (por ayer), porque escuchó que estuve en la radio, los insultó y les pidió que se vayan si están en su contra”.
Desde el barrio Doctor Montaña debió partir junto a su hija menor a buscar refugio en la casa de un familiar. Sus otros dos hijos quedaron ya que no tienen otro lugar donde ir.
“Me quemó prácticamente todas mis ropas y en todo momento vivía en la casa con miedo porque no dejaba de buscarme”, dijo Laura, quien contó que el hombre pretendía recomponer la situación amorosa “sin comprender que yo ya no quiero saber más nada con él”.
La gota que rebalsó el vaso ocurrió el lunes cuando éste la fue a buscar en la casa de unos amigos que ella había ido a visitar. “Él me encontró. Yo estaba de visita en la casa de una familia. Entró a la casa ajena hasta la puerta sin pedir permiso y el dueño le dijo que se retire, que quién es él para ingresar así. Cuando salí me siguió tres cuadras en su moto y me chocó por atrás, yo también iba en moto. Al caerme me agarró a patadas y piñas, yo me pude defender sólo tapándome la cara porque sino seguramente me sacaba hasta los dientes.
Cuando pude mirar me di cuenta que había un montón de gente que le gritaba ‘cobarde’ y él también les decía todo tipo de insultos. Si los vecinos no hubieran salido a lincharlo y a ayudarme yo creo que hoy no estaría contando esto. Me mataba y me dejaba tirada en la calle”. La mujer pide a gritos ayuda y asegura que sólo quiere luchar por sus hijos, quienes hace días no están cursando sus estudios por la situación que vienen atravesando.
Miércoles, 15 de mayo de 2013