MUNDIAL FIFA RUSIA 2018
¿Y ahora? Messi se fue en silencio y su futuro es una incógnita
Se fue otra oportunidad. Solo él sabe si habrá otra, porque en Qatar 2022 tendrá 35 años. Lionel Messi quedó retenido en la telaraña de Francia, que le cerró los caminos y lo dejó con la frustración de una nueva chance perdida en el Mundial de Rusia 2018, parado en el medio de la cancha del Arena Kazán casi sin poder reaccionar.
El crack tuvo una actuación para el olvido en la derrota con Francia y no quiso hablar una vez consumada la eliminación. Muchas sombras aparecen en su futuro. ¿Seguirá?
Sin poder resolver la marca planteada por NGolo Kante y Blaise Matuidi, Messi no pudo darle continuidad a la ilusión encendida en los hinchas argentinos por su gol ante Nigeria en el partido anterior. Más allá de su bajo nivel individual, la "Pulga" fue víctima de un equipo opaco, sin trabajo ni coordinación, que nunca lo ayudó a resaltar sus virtudes en el campo de juego.
El único futbolista que asomó por momentos como un posible socio para su juego fue Ever Banega en el choque ante Nigeria, pero el volante de Sevilla no pudo repetir con Francia y la "Pulga" apenas mostró pincelazos de su juego ante los dirigidos por Didier Deschamps.
Lo poco de Messi en la tarde de Kazán se remitió a un pase profundo para Cristian Pavón, una jugada individual que definió con un remate sin fuerza y un pase gol para Sergio Agüero en el tercer tanto argentino.
Cuando el árbitro iraní Alireza Faghani marcó el final del encuentro, Messi se mostró abatido y Javier Mascherano lo vino a buscar para que lo acompañara junto a sus compañeros a saludar a los miles de argentinos que habían alentado en el estadio. Acto seguido, la "Pulga" se sacó la cinta de capitán y se fue a los vestuarios. Y más tarde, se retiró del estadio sin realizar declaraciones. Lo hizo con los ojos rojos y un bolsito de mano, escoltado por su amigo Sergio Agüero y, más atrás, Jorge Sampaoli y su ayudante Sebastián Beccacece.
El estado de ánimo del crack del Barcelona fue tema de discusión en los últimos días, incluyendo temas extrafutbolísticos, como la incertidumbre por el estado de su relación con Antonela Roccuzzo. La joven, que no estuvo en Rusia ni el Día del Padre ni cuando Messi cumplió años -el 24 de junio-, finalmente llegó junto a sus hijos a última hora del viernes a Kazán y pudo visitar a su esposo en la concentración de la Selección argentina. Luego, Roccuzzo y la familia de la "Pulga" estuvieron en el Kazan Arena, donde el futbolista no pudo torcer su historia en los Mundiales y volvió a despedirse sin éxito, al igual que en Alemania 2006, Sudáfrica 2010 y Brasil 2014.
Sábado, 30 de junio de 2018