SUPERLIGA
Wilmar Barrios, el equilibrio del Boca campeón
Wilmar Barrios es para Boca lo que la Luna para la Tierra: el encargado de darle el equilibrio. Con sus movimientos alrededor de la mitad de la cancha, el colombiano mantuvo firme en su eje al equipo de Guillermo Barros Schelotto a lo largo de la Superliga que terminó con la coronación del bicampeonato.
Con su estilo de juego, el volante colombiano se convirtió en unas de las figuras principales de este Xeneize de Guillermo Barros Schelotto y terminó siendo fundamental para sumar la nueva estrella
A tal punto que su presencia se tornó indispensable para el desarrollo de la idea del Xeneize. Justo hoy, el día más esperado, se lo perdió: sintió dolor en el calentamiento previo y fue reemplazado por Sebastián Pérez.
El amor que despertó Barrios en Guillermo y en el mundo Boca nació el mismo día del debut del colombiano: el 29 de octubre del 2016 con Temperley, cuando ingresó a los 27 minutos del segundo tiempo por Pablo Pérez. En ese bautismo, Wilmar mostró buen pie para el juego, carácter para la marca, despliegue físico en el mediocampo y fue aplaudido por toda La Bombonera.
Desde su debut, Barrios demostró ser grande.
"Los aplausos de la gente de Boca fue algo muy lindo", expresó en ese momento el volante de la Selección Colombia. Algo le habían visto los hinchas xeneizes, y no se equivocaron. Quizá, Guillermo tardó en darse cuenta la joya que tenía en el banco. Pero con el paso de los partidos y el nivel que lució en cada oportunidad que tuvo, el Mellizo entendió que era una pieza única e irrepetible.
Después de la recordada derrota con River por 3-1 en La Bombonera (el 14 de mayo de 2017), Wilmar Barrios agarró la titularidad en el equipo de Guillermo, luego fue uno de los campeones siendo titular, y de ahí no salió nunca más, convirtiéndose en uno de los jugadores más importantes del esquema del Mellizo y en uno de los mimados por la hinchada.
Con el título abajo del brazo y la muestra de grandeza que tuvo en la primera conquista de la Superliga, Barrios arrancó la siguiente temporada como un pilar para la estructura del juego del conjunto de Guillermo.
Jugó los primeros 17 partidos de manera consecutiva; se perdió el choque con Argentinos por una cuestión de rotación -Guille le dio descanso-; luego retomó la titularidad que había cedido para tener un relax, jugó con Temperley, Atlético Tucumán, Talleres, Defensa e Independiente, y en este último partido, apareció un problemón: Barrios sufrió un desgarro. Y el equipo lo sintió, lo extrañó con Newell's, Palmeiras y Junior, y ahí quedó mucho más en evidencia que el colombiano en Boca es uno de esos jugadores irreemplazables.
Tras estas ausencias dolorosas para el Xeneize, Barrios retornó a la titularidad con Unión y volvió a dejar en claro que es uno de los principales pilares de este Boca campeón de la Superliga. Con Gimnasía, el día del grito "dale campeón" de todo el mundo xeneize, el colombiano se quedó afuera 20 minutos antes del comienzo del partido en el Bosque. Pero igual, Wilmar fue uno de los héroes de este nuevo título. Uno de los responsables de que el Xeneize haya sumado la estrella 67 de su historia. El Barrios de la Boca...
Jueves, 10 de mayo de 2018