SUPERLIGA
Las 3 cosas que River debe corregir antes de que sea demasiado tarde
En la derrota ante Huracán, el equipo de Gallardo prolongó males que venía evidenciando desde el año pasado. En qué aspectos debe mejorar para cambiar el rumbo. Le falta contundencia y, encima, le llegan y le convierten
En el primer tiempo la imagen de River tuvo algo que se repitió mucho en año pasado: le pisan el área y le convierten. La frase de Gallardo durante el 2017 fue "nos llegan poco y nos anotan mucho". Y el 2018 se inició con el mismo tono. Una distracción, un mal pique y el error encadena otro error que acaba en penal. Si había algo bueno de River en su faena en Parque Patricios, se diluyó con ese penal bien pateado por Pussetto. Lo peor del equipo del "Muñeco" pasa por ahí, que no le dan doble chance y que ya en la primera que padece es gol en contra. A partir de ahí, el equipo queda atado al error y no puede salir.
Es increíble cómo en esos 45 minutos, luego del gol el equipo, no pudo sostener lo positivo de la primera parte de ese tiempo. Si antes tenía un 70 por ciento de posesión y alto porcentaje favorable de los pases, luego de la media hora, cuando pasó a perder, sus números empezaron a caer. De ese modo, el equipo cedió la pelota y cuando la consiguió la rifó más de la cuenta. Hasta en una pelota parada perdió el sentido y no le hicieron el segundo de pura casualidad.
El medio, por su jerarquía, debe pisar más fuerte
Otro saldo negativo de la derrota ante Huracán fue la falta de participación efectiva y sólida de sus volantes Enzo Pérez y Nacho Fernández. Por ellos la pelota no pasó demasiado, lo que obligó a que Gonzalo Martínez se desgastara mucho. Todo pasó por el Pity, y al no tener descanso, ni sorpresa, acabó siendo bien tomado y eligiendo mal el pase final. Todo se fue encadenando, porque más perdía la bola en la zona de gestación, menos sorpresa generaban los laterales al pasar y los puntas para encontrar espacios en un sector donde había mostrado buenas cosas en el arranque del partido.
Fragilidad defensiva
Con poco, Huracán le desnudó descuidos y bajos rendimientos en algunos jugadores. Como Gonzalo Montiel, que no pudo con Ricardo Noir. Como Lucas Martínez Quarta y Marcelo Saracchi, que padecieron a Ignacio Pussetto. Germán Lux y Javier Pinola bancaron los errores y las malas decisiones en la marca del resto de los defensores. River fue un equipo liviano en defensa y eso acabó repercutiendo en la confianza del resto del equipo. Si bien después, en la etapa final, no le llegaron tanto, fue más porque el Globo se retrasó en el campo y lo atacó poco, que por corregir cosas defensivas que deberán arreglar en la semana, en especial con la concentración y en los relevos cuando los laterales suben a zona de ataque.
No todas son pálidas
Pity-Borré-Scocco fue un tridente que mostró buenas cosas. Movimientos, entradas y salidas, paredes y rotación continua. En especial el 10 del "Millo", que tiene una vergüenza deportiva terrible para pedirlas todas. Si River no se cae cuando va perdiendo y muestras falencias atrás es porque tiene un jugador que puede sacar del encierro al equipo. Desde sus enganches, desde su verticalidad, desde la calidad para acelerar, el Pity es lo mejor que tuvo el equipo y por él River siempre estuvo en partido.
Además, hubo buenas conexiones -sobre todo- con Ignacio Scocco, y en varios pasajes con Rafael Borré. Los tres fueron de lo mejor en el arranque del partido y cuando, en el segundo tiempo, fueron a buscar el empate. Borré tuvo dos ocasiones muy claras y no pudo. Lo mismo Scocco. River, además, suele rebelarse ante momentos complicados: fue un sello del equipo y eso sigue estando. Sufre pero se levanta y busca corregir lo malo que se auto-genera.
Gallardo incluso mandó a la cancha a Lucas Pratto: debutó y pesó poco, pero se espera que el ex Vélez aporte un salto de calidad en la ofensiva. Tiene recambio River y es un punto positivo. El equipo tiene banco, algo que el año pasado sufrió, y eso genera competencia interna y posibilidades de resolverse momentos de partidos que no encuentran soluciones con los titulares. El ingreso de Rodrigo Mora fue otro aspecto positivo y le ofrece al DT la chance de jugar con tres puntas. Sin embargo, todo eso bueno no le alcanzó para dar vuelta la historia, que arrancó mal con aquella distracción en la parte inicial.
Lunes, 29 de enero de 2018