COPA LIBERTADORES
Gallardo ultima detalles para buscar su décima final como DT de River
Con Saracchi desgarrado, el único cambio en relación al partido de ida que ganó 1 a 0 en el Monumental será el ingreso de Casco. Tal como sucedió en la ida, los hinchas que recibieron al equipo aquella vez ahora planean una despedida multitudinaria en la puerta del estadio
El Muñeco ya tiene el partido en su cabeza y lo único que le retocó los planes fue que Marcelo Saracchi se haya desgarrado, pero sabe que con Milton Casco el libreto también está estudiado. Por eso sólo habrá un cambio para mañana en la Fortaleza Granate en cuanto a los nombres, pero de la estrategia para el partido no ha cambiado mucho, ya que la ventaja de la ida no lo obliga a cambiar de postura.
La idea es jugar igual en cuanto a la tenencia de la pelota -de local fue casi un 60% a 40%- y la explicación es que, según cuentan desde adentro, dejarle la pelota al rival y apostar a la contra sería equivocado. ¿Por qué? Porque hacer un gol para River es casi el pasaje a la final, ya que obligaría al rival a anotar 3.
Así las cosas, los trabajos de la semana fueron de una intensidad en cuanto a control y tenencia que será la llave de la resolución, porque además de quitarle el dominio al rival lo aleja de la zona de la propia defensa.
“Ganar y que no nos hayan anotados goles fue casi el pase a la final”, dijeron varios jugadores que se hacen fuertes en la idea de que River anotó goles en todos los partidos de la Copa que jugó, de local y de visitante, menos ante Wilserman. Fuera de su casa, el Millo anotó 3 goles al DIM, 2 a Emelec, 3 a Melgar y 2 a Guaraní. El promedio es alto para una Copa: 10 en 5 juegos. Algo que se mantuvo en el torneo local, donde recién con los juveniles frente a Talleres no pudo convertir (antes llevaba 4 juegos seguidos anotando fuera de casa).
La semana pasada, Javier Pinola decía: “Nosotros sabemos que en algún momento los volantes y delanteros van a convertir, por eso tenemos confianza”. Por estas razones el equipo festejó el 1 a 0 como si fuera una goleada. Mañana a la noche se sabrá si esa ventaja fue tan decisiva y si finalmente le sirve para llegar a una nueva final.
Con este panorama, habrá entrenamiento esta tarde, con equipo concentrado y confirmado. Los 11 ya están: Lux, Montiel, Maidana, Pinola y Casco; Ponzio; Gonzalo Martínez, Rojas, Pérez y Nacho Fernández; Scocco. Ese 4-1-4-1 que tanto ensayó en la pretemporada ahora se va a repetir como en la ida para que la presión de los volantes ofensivos adelante de Leonardo Ponzio pueda lograr mantener a Lanús lejos del arco de Germán Lux. Quedaron concentrados, también, Batalla, Barboza, Iván Rossi, Exquiel Palacios, Carlos Auzqui, Rafael Borré y Nicolas de la Cruz.
Mirá qué hinchada...
Toda esta ilusión se replica en los fanáticos que desde la subcomisión del hincha ya convocan a repetir el apoyo en la previa. Tal como sucedió en la ida, cuando recibieron a los jugadores que llegaron desde Cardales al Monumental, ahora harán lo mismo en la salida del micro por Udaondo y los van a esperar con una concentración en el puente Labruna entre las 18 y 19 horas. La falta de posibilidades de ir de visitante hará que muchos se queden viendo el partido en el club. Se viene un nuevo momento histórico para este grupo que desde 2014 no para de competir en el más alto nivel.
Lunes, 30 de octubre de 2017