DEPORTES
Mauro Icardi mandó buenas noticias a la Selección antes de las Eliminatorias
Ese niño que alguna vez fue Mauro Icardi se regocija con la pelota que le queda frente al arco, como cuando jugaba en el club Sarratea. Davide Astori, corpulento zaguero de Fiorentina, queda atrás.
Pero el rosarino siente una ráfaga, esa pierna que intenta despejar y se zambulle en el área, con la picardía que mostraba en el baby fútbol del barrio La Cerámica. El árbitro Pablo Tagliavento compra y marca penal. Y el “9” convierte, con el pie bien abierto, un destello de calidad. Recién enciende motores el partido en el Giuseppe Meazza y en la vuelta al fútbol oficial ya no hay rastros del desgarro que apenas le permitió coquetear con la Selección de Jorge Sampaoli. Y no pasa un ratito que se eleva en el cielo de Milán para desviar un centro de Iván Perisic y dejar sin chances a Marco Sportiello. Es el segundo grito del rosarino de 24 años, el 80° con la camiseta del Inter. Es el mejor regalo que puede hacerle al reflejo del pibe, a ese pasado que lo encontró sin juguetes durante la crisis de 2001, antes de que su padre Juan Carlos decidiera emigrar con su familia a las Islas Canarias para trabajar en un restaurante.
Icardi ya no es Cañito, el apodo que se ganó en Rosario por su cuerpo largo y sus piernas flacas. Hoy es un hombre que pisa fuerte en el calcio. Pero esa sonrisa que dibuja en cada festejo encierra la satisfacción del sueño infantil que está a punto de cumplir. El 31 de agosto, en Montevideo, será la referencia del área de la Selección. Después de los rumores, de esa veda implícita que tuvo como cómplices a varios técnicos. Sampaoli le abrió las puertas. Y nada mejor que llegar con el botín caliente al clásico rioplatense. MI9 está listo.
“No pude trabajar con normalidad con mis compañeros, pero me preparé para estar lo mejor posible para este partido. Quería estar y, por suerte, pude hacerlo”, dijo Icardi, la figura de una goleada (3 a 0, el gol restante fue del croata Perisic) que puso en carrera al Inter en el comienzo de la Serie A. Eso sí, el bombardero no se dejó llevar por la primera impresión. “¿Si este puede ser un gran año?Es el primer partido, no podemos apresurarnos”, agregó con convicción.
Icardi elogió a Luciano Spaletti, el entrenador que llegó de Roma, donde hizo un campañón, pero no le alcanzó para destronar a Juventus. “El técnico me da confianza, algo que por ahí antes no teníamos. Además, me pide siempre que profundice en el juego y eso me ayuda”, puntualizó. Y reconoció que está muy enchufado por su próximo desafío, jugar con la camiseta celeste y blanca. “Hacía cuatro años que esperaba la convocatoria a la Selección Argentina. Y es el fruto lo que vengo haciendo hasta ahora”, recalcó Mauro, quien desplazó de la lista de Sampaoli a Gonzalo Higuaín y postergó a Sergio Agüero.
Los dos goles que marcó ante Fiorentina -debutó Gio Simeone- son una buena noticia para el técnico de la Selección. Un respaldo a la fuerte y osada decisión de convocarlo. A pesar de los dimes y diretes que se construyeron alrededor de su matrimonio con la ex modelo Wanda Nara.
Lunes, 21 de agosto de 2017