Incorporación de sal a la comida es cultura
Reducir cantidad de sal de las comidas no significa sacrificar sabor
Tras considerar que la incorporación de sal a la comida es cultural, especialistas explicaron que "cualquier persona que empieza a consumir menos sodio en forma gradual produce un aumento de las papilas gustativas y los receptores del sodio y empieza a sentir los mismos sabores que cuando consumía más sodio"
Los argentinos estamos acostumbrados a comer con bastante sal. Si bien el máximo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) es de 5 gramos, se estima que en la Argentina cada persona consume alrededor de 12 gramos diarios, y un cuarto de la población tiene la costumbre de agregar sal a las comidas antes de probarlas, hábito que constituye un factor de riesgo muy importante para el desarrollo de enfermedades crónicas no transmisibles.
Martes, 22 de mayo de 2012