NORTE DE ITALIA
Al menos siete muertos y alrededor de 50 heridos por un terremoto
Un terremoto de magnitud 5,9 en la escala Richter sacudió en la madrugada el norte de Italia, donde murieron al menos siete personas e importantes bienes culturales resultaron dañados. La zona más afectada es la región en torno de Bolonia, Módena, Ferrara, Mantua y Rovigo. Según la televisión pública RAI, hay unos 50 heridos, aunque otros medios elevan la cantidad. Tras el primer terremoto, que se produjo a las 4.04 de Italia (0.04 de la Argentina), hubo varias réplicas cuya magnitud osciló entre 5,1 y 2,9.
La réplica más fuerte provocó el derrumbe de otros edificios. Por la noche, volvió a registrarse un movimiento telúrico de 4,8 de magnitud.
Dos de los fallecidos eran trabajadores que murieron entre los escombros de una fábrica de cerámica en Sant`Agostino, cerca de Ferrara, mientras que un tercero murió en una fábrica de metal de las proximidades.
La cuarta víctima mortal fue hallada en una zona industrial en Bondeno, unos 15 kilómetros al norte de Sant`Agostino.
También fue encontrada muerta una mujer alemana de 37 años en Casale, quien, tras el sismo, tuvo problemas para respirar y perdió la consciencia. Se cree que su muerte pudo haber sido desatada por el pánico.
En Sant`Agostino falleció además una mujer de 103 años, posiblemente debido también a un ataque de pánico, informan medios italianos. En cambio, una niña de cinco años pudo ser rescatada de las ruinas en Finale Emilia.
El primer ministro italiano, Mario Monti, decidió regresar de la ciudad estadounidense de Chicago, donde debía asistir hasta mañana a la cumbre de la OTAN.
"En vista del trágico acto en Brindisi y del terremoto en Emilia Romagna, he decidido participar sólo en el principio de la Cumbre de la OTAN y regresar para estar mañana en la tarde en Italia", dijo Monti en un comunicado reproducido por la prensa italiana.
El papa Benedicto XVI también mencionó a las víctimas tanto del ataque de este sábado como del terremoto del domingo. "Mi espíritu está con quienes se vieron afectados por esta desgracia", dijo el pontífice.
El epicentro del temblor se situó en el valle del Po, y el hipocentro a una profundidad de en torno a diez kilómetros.
Según medios italianos, las localidades de Finale Emilia y San Felice fueron las que sufrieron mayores daños. En esta última se derrumbó una iglesia y varios lugares históricos se vieron afectados.
Las imágenes de televisión mostraron edificios gravemente dañados y escombros por las calles. Según testigos, se han derrumbado edificios, iglesias y torres. El miedo hizo que algunas personas salieran a la calle en pijama.
El temblor también se sintió en Milán y en la provincia de Venecia. No obstante, la ciudad de los canales no ha sufrido daños.
Cerca de 3.000 personas quedaron sin hogar tras el movimiento sísmico: unas 2.500 en la provincia de Módena y otro medio millar en Ferrara.
Pese al temblor, las elecciones municipales convocadas para hoy y mañana en unas 120 ciudades italianas siguieron su curso previsto, informa la RAI. Los colegios electorales estuvieron abiertos hasta las 20 locales, y reabrirán este lunes para la segunda jornada electoral.
El sismo del domingo fue casi tan fuerte como el que sacudió Aquila el 6 de abril de 2009, de magnitud 6,2 y que provocó la muerte de 300 personas y dejó sin casa a cerca de 60.000.
Algunos sismólogos se vieron sorprendidos por la magnitud del movimiento telúrico en esa zona italiana.
"En general, Italia siempre está en peligro de sufrir terremotos, pero algunas regiones tienen menos riesgo", explicó el geofísico Winfried Hanka, del centro de geociencia alemán de Potsdam, que estimó la magnitud del temblor en 6,1 en la escala de Richter, por encima de los datos italianos.
La zona afectada es precisamente una de las que tradicionalmente ha registrado pocos temblores.
Domingo, 20 de mayo de 2012