POR DANIEL CARAM
Otra vez salud pública sin combustible
Días atrás, en éstas líneas y en relación al caso del concejal baleado en Esquina, apuntábamos a la absoluta desconexión que hoy existe en el sistema de salud pública de la Provincia. Y hablábamos de una localidad ubicada a más de 300 kilómetros, haciendo mención a cómo se agravarían las cosas en poblaciones más lejanas.
Y como los propios hechos superan la realidad, lo ocurrido hoy con un alumno de una escuela del barrio San Gerónimo vuelve a darnos la razón debido a la anticipación con que marcamos el tema.
Esto ocurrió en un barrio no muy alejado del centro. Y hasta allí no pudo ir la ambulancia del servicio de emergencias (107) porque no tenía combustible.
Sí, de no creer. Preocupante e insólito.
En el medio, operativos de prensa, cruces, dimes y diretes.
Para entender todo, habrá que contar algunos detalles, como que los docentes de la escuela (Raúl Alfonsín, del barrio mencionado) fueron desesperados a pedir ayuda a la sala municipal (SAPS) ubicado a pocas cuadras, en Laprida y Centenario.
Esa intervención de la comuna sirvió para que el estado provincial intente despegarse de su responsabilidad, aduciendo que fueron allí donde no quisieron atenderlo.
Después, la explicación oficial de cómo actúa el sistema de emergencias, y los debidos procedimientos de protocolo que deben seguir.
Pero el tema está claro y nos exime de explicación: los vehículos andan o no andan. Y si no tienen combustible, por obviedad no lo hacen. Puede parecer un juego de palabras, y un mal menor si se trata de un vehículo cualquiera… pero al ser una ambulancia.
¿Hay necesidad de explicar lo inexplicable?. El final de la historia, por suerte, es el mejor, ya que –como en otros casos- actuaron los bomberos con su ambulancia, y el pequeño accidentado está bien.
Después del miniconflicto vendrán las explicaciones del caso, y se sabrá –pruebas mediante- quienes fueron los responsables de éste despropósito.
La mención final para un sistema que desde hace rato no tiene nafta. Por eso no vamos a ningún lado.
Jueves, 24 de abril de 2014