POR DANIEL CARAM
Ricardo Colombi creyó que golpeaba tapera
Le suele pasar a Colombi, un hombre que suele hablar poco, y cuando lo hace critica a quienes terminan siempre ayudándolo. En Buenos Aires, el Gobierno Nacional le dio aire al Primer Mandatario correntino, luego de una semana nefasta con la cuestión Virasoro como parámetro, en el corolario de una crisis energética sin parangón.
La financiación de obras de distribución de energía en Corrientes por un monto de 182 millones de pesos en la primera etapa; Nación licitará la línea en 132 kv de interconexión entre Apóstoles (Misiones) y Virasoro; la financiación de la adquisición de un nuevo transformador de igual capacidad al averiado: 30 MVA. Y a ello se suma la construcción de la línea en 132 desde Ituzaingó a Paso de la Patria.
Todo eso en cuestión de horas.
¿Qué dirá ahora el rebelde Gobernador de Corrientes, que elige medios amigos (pagados) para defenestrar cuando puede y quiere al Gobierno Nacional?, ¿Tendrá la grandeza para admitir que sin la ayuda de Cristina Kirchner, De Vido y compañía, sus próximas semanas habrían sido un pesado trajinar con correntinos indignados ante la absoluta ineficacia de sus funcionarios?, ¿Soluciona su incapacidad para escuchar y aceptar, la importante ayuda nacional?, ¿dejará, de una vez por todas, de creer que todo se soluciona desde 25 de Mayo y Salta, a partir de una supuesta administración ordenada y previsible?.
Colombi terminó aceptando las leyes del juego, y fue a Nación a buscar lo que siempre consiguió: ayuda.
Uno se imagina que no le habrá salido gratis sus últimos desplantes, y a sabiendas de la constante colaboración de la administración central para Corrientes, seguramente pudo haber habido más de un reproche, relacionado con su mala costumbre de aullar y reclamar sin razón.
“Se comprometió Nación a dar respuestas”, dirán los comunicados oficiales, descartando términos y adjetivos relacionados con una postura sumisa, que en todo caso es aceptable cuando se debe dar respuestas en medio del caos.
Colombi fue, y creyendo ir a una tapera, lo hizo en silencio. Volvió lleno de plata, de Nación. ¿Tendrá la grandeza de reconocerlo?. Lo dudo.
Miércoles, 16 de abril de 2014