TAMBIÉN EN SANTO TOMÉ
Crece el malestar por los cortes de luz
Los vecinos creen ser víctimas del reclamo de los trabajadores, que no salen a las calles por falta de seguridad, aunque no están de paro. Desde la empresa prestataria del servicio indicaron que se está llegando a un principio de acuerdo pero la situación energética es la misma.
Los cortes de luz en Santo Tomé despertaron el enojo de los vecinos que desde diversos barrios advierten que “pagaron el pato” de la medida de fuerza llevada adelante por trabajadores de la Dirección Provincial de Energía de Corrientes (DPEC), quienes reclaman mejoras en las condiciones laborales. Advierten que hay una camioneta para atender a 9 mil usuarios dentro de la ciudad y no cuentan con móvil para el área rural.
“Tres días estuve sin luz, se me fundió todo lo que tenía en la heladera. Llamé la semana pasada y me respondieron que estaban de paro, que me solidarice con ellos. Que posiblemente algún vecino podía guardar mis cosas en su heladera”, dijo una vecina de la zona Sur.
USINA VIEJA. ÚNICO LUGAR DESDE DONDE SALIERON LAS RESPUESTAS.
USINA VIEJA. ÚNICO LUGAR DESDE DONDE SALIERON LAS RESPUESTAS.
“Acá es por 24 horas, parece que sortean la línea que van a cortar. Ese día que cortan es hasta el otro día a la misma hora”, señaló otra vecina.
Los cortes de electricidad se suceden, el enojo de la gente también. Las explicaciones de la empresa llegan desde la usina vieja, a la salida del pueblo, y no desde sus oficinas céntricas.
El delegado del Sindicato de Luz y Fuerza, Silvio Orlando Viera, explicó los alcances de la protesta: “Estamos en una medida de fuerza, que no es un paro, pero estamos exigiendo que la empresa DPEC cumpla con la ley de higiene y seguridad. Nada más que eso. No estamos sin prestar servicios”.
Además, Viera comentó que “en este momento hay un transformador quemado en el (paraje) Atalaya, eso fue por un rayo. Está hecho el pedido para que manden el transformador”.
En tanto desde la empresa prestaría del servicio indicaron que hay un principio de acuerdo pero la situación con cortes de luz y bajones de tensión es la misma.
Situación precaria
“Nuestra planta de personal es reducida. Una persona en redes y la guardia. También tenemos deficiencia en móviles. Hay una camioneta para atender las necesidades de 9 mil usuarios en toda la ciudad, y no tenemos móvil para la zona rural. La situación es precaria. La gente se redobla en el esfuerzo, en trabajo, pero la empresa no da una solución a nuestros reclamos. Hay operarios que trabajan hasta 18 horas de corrido. Y encima hay veces que no se les paga las horas extras”, relató Viera.
Los trabajadores exigen ropa, calzado y elementos de trabajo, pértigas, vehículos en condiciones, ART y herramientas en general. “No estamos exigiendo nada que no corresponda, no queremos ponernos en contra de la comunidad. El usuario tiene el derecho a tener el servicio, pero nosotros también tenemos el derecho a tener nuestra seguridad”, subrayó Viera.
(Epoca)
Sábado, 5 de abril de 2014