EXPEDICIÓN
"Está muy bien", dijo el padre del argentino que integra la expedición en la Antártida
Ezequiel Marzinelli, el único argentino que se encuentra en el barco ruso Akadémik Shokálskiy varado en los hielos antárticos, es biólogo marino, trabaja como investigador y docente para el Estado australiano y se encuentra "muy bien, realizando su tarea", dijo a Télam su padre."
Es su primera expedición científica", contó Miguel Marzinelli sobre su hijo, recibido con diploma de honor en la Universidad de Buenos Aires y especializado en biología marina en Australia, donde trabaja en la Universidad de Sídney y en el Centro de Investigaciones Marinas.
En esta primera experiencia, el argentino, junto a otros 26 científicos, rememoran la expedición que efectuó hace un siglo el explorador Douglas Mawson en la Antártida y que ofreció el primer estudio completo del continente helado.
El buque ruso que los trasladaba se encuentra preso en el hielo a unos 2.778 kilómetros al sur de la ciudad australiana de Hobart y cerca de la base francesa Dumont d`Urville, situada en el sureste de la Antártida, desde la Nochebuena.
"Mi hijo no tenía previsto embarcarse, pero tuvo que reemplazar a otro científico, y como Ezequiel es especialista en manejar robots que toman muestras en lugares inaccesibles, se sumó al equipo", relató su papá.
El joven de 30 años "habló con su novia, la bióloga brasileña Marina Mayer, y le dijo que está muy bien, que baja del buque para sacar muestras, realizar observaciones; que encontraron nuevas especies de aves y que caminan bastante", explicó Marzinelli padre.
El hombre valoró que su hijo "es un gran deportista; hizo rugby, esquí, es un excelente buzo, ya que trabaja mucho en el fondo marino, lo que colabora a su buen estado físico en la situación que está atravesando".
Al científico argentino se lo conoce con el sobrenombre de "Ziggy" por su fanatismo por el cantante jamaiquino Bob Marley, que utilizaba el mismo apodo "ya que Ezequiel es impronunciable en inglés", compartió Miguel.
El "Ziggy" argentino, residente en Australia, ha realizado investigaciones en Escocia, Alemania, Brasil y en la ciudad argentina de Puerto Madryn, en Chubut.
En la Antártida está investigando la interacción entre los microorganismos y macroorganismos de las comunidades marinas, así como el impacto del cambio climático y otras perturbaciones humanas en estas dinámicas.
Además de los 26 científicos, otras 48 personas, entre turistas y periodistas, se encuentran en el buque atrapado en la Antártida.
El plan es que, en cuanto las condiciones climáticas lo permitan, un helicóptero los evacúe en grupos de doce hasta otro barco, lo que ocurriría en las próximas horas.
Martes, 31 de diciembre de 2013