RECORD
Filipinas: "Yolanda" se convirtió en el mayor tifón medido en la historia
El tifón que azotó a las Filipinas el viernes y generó miles de muertos, con vientos que alcanzaron los 315 kilómetros por hora con ráfagas de hasta 380, fue clasificado así por meteorólogos japoneses y estadounidenses. Clasificado en la categoría 5, el centro del súper tifón tuvo en el punto máximo entre 870 y 895 hectopascales, reportó la agencia italiana Ansa.
El récord anterior lo tenía "Tip", que actuó del 4 al 19 de octubre de 1979 y el 12 de ese mes azotó Guam, en Japón, durante la temporada de tifones del Pacífico. Su diámetro fue de 2.200 kilómetros, en el centro registraron 870 hectopascales y generó vientos de 305 kilómetros por hora.
Tifones, huracanes y ciclones son nombres de un mismo fenómeno meteorológico capaz de descargar una potencia equivalente a diez bombas atómicas como la que se lanzó en Hiroshima.
Los tifones del Pacífico son fenómenos similares a los huracanes que se originan en el Océano Atlántico. En Australia se los conoce como "Willy", en Haití como "Taino", en Filipinas como "Baguio"y en India simplemente como ciclones.
Los tifones o ciclones se forman en los trópicos y subtrópicos cuando la temperatura del mar alcanza entre 25 y 27 grados, originando perturbaciones que se trasladan a una masa de aire cálido y húmedo.
Las perturbaciones de la temperatura en ascenso se condensan y atraen el aire más caliente, que genera una especie de reacción en cadena.
Mientras tanto, las corrientes de aire que rodean comienzan a girar hacia la izquierda (en el sentido horario en el hemisferio sur), debido a la rotación de la Tierra, arrastrando las nubes de la perturbación.
Cuando los vientos alrededor de la perturbación se estabilizan en 100 kilómetros por hora, se genera un huracán, ciclón o tifón.
La única zona "tranquila" es su centro, pero las paredes del "ojo de la tormenta" son generalmente el punto donde los vientos soplan con más violencia.
Los tifones suelen ser más numerosos y entendidos como huracanes debido a que el Pacífico es más cálido que el Atlántico.
Una vez formados, los tifones se desplazan de este a oeste y miden entre 500 y 1.000 kilómetros de diámetro.
La escala de intensidad usada para medir estos eventos se llama Saffir-Simpson pues fue desarrollada por el ingeniero Herb Saffir y el meteorólogo Bob Simpson, en 1969.
Esa escala no tiene en cuenta los efectos secundarios tales como lluvias e inundaciones y se basa en la medición de la velocidad máxima del viento a 10 metros de altura y dividida en dos partes, con dos categorías iniciales reservadas para las tormentas (de 0 a 62 kilómetros por hora y de 63 a 177 kilómetros por hora).
Estas dos categorías iniciales se complementan con otras cinco según la intensidad de los huracanes/tifones.
La última categoría, que adquiere la dimensión de "catastrófica", se alcanza con vientos de más de 250 kilómetros por hora.
Domingo, 10 de noviembre de 2013