ÁNGELES RAWSON
Una junta médica y una audiencia de Cámara definen el futuro de Mangeri
El futuro de Jorge Néstor Mangeri, el portero detenido como presunto autor del crimen de Ángeles Rawson, comenzará a definirse hoy con el inicio de una nueva junta médica y una audiencia oral ante la Cámara del Crimen para definir si atacó sexualmente a la joven y si son válidas las pruebas de ADN.En primer término, a las 9.30, en la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional, ubicada en la calle Viamonte 1147, se hará la audiencia oral en la que la defensa de Mangeri (45) intentará sostener el planteo de nulidad -rechazado en primera instancia-, en el que afirman que hubo contaminación en los estudios de ADN que incriminaron a su cliente.
Tal como sucedió en la otra audiencia oral que tuvo la causa el pasado 29 de agosto, donde se trataron otras nulidades y el procesamiento del portero, cada una de las partes expondrá sus argumentos ante los jueces de la Sala VI, integrada por los camaristas Mario Filozof, Julio Marcelo Lucini y Ricardo Pinto.
Allí estarán presentes los abogados Miguel Angel Pierri y Marcelo Biondi por la defensa, la fiscalía de Cámara de Ricardo Sáenz y el abogado querellante Pablo Lanusse, quien representa al padre de la víctima, Franklin Rawson.
Fuentes judiciales informaron a Télam que los camaristas autorizaron a que la audiencia sea trasmitida en vivo por el Centro de Información Judicial, en su sitio "CIJ TV".
Pero además, a las 10, los peritos que integran la junta médica en la causa se reunirán en la sede del Cuerpo Médico Forense (CMF) de la calle Lavalle 1429.
Allí, coordinados por el juez de la causa, Javier Feliciano Ríos, y el decano del CMF, Roberto Luis María Godoy, los expertos deberán definir si la víctima sufrió un ataque sexual, lo que podría agravar la imputación contra Mangeri.
La junta médica, de la que también participarán los peritos de parte, analizarán los resultados de los estudios histopatológicos que se hicieron sobre 55 muestras de tejidos y huesos que fueron extraídas del cuerpo de Ángeles luego de la exhumación.
Los histopatológicos -la observación en microscopio de los tejidos- definirán, entre otras cosas, si las lesiones genitales y paragenitales que presentaba Ángeles son de carácter vital o post mortem y así determinar si fueron ocasionadas durante un ataque sexual.
Los voceros explicaron que lo más probable es que más allá de que la junta médica llegue a alguna conclusión, la respuesta definitiva será presentada al juez unos días más tarde y por escrito.
Luego de este nuevo informe de la junta, el juez Ríos tiene planeado ampliarle a Mangeri su declaración indagatoria, como ya le sugirió en septiembre pasado la Sala VI de la Cámara del Crimen al confirmar el procesamiento y la prisión preventiva del portero.
Si el CMF ratifica que hubo ataque sexual, el juez Ríos volverá a imputarle al ex encargado de Ravignani 2360 un homicidio con pena de prisión perpetua, ya que actualmente la Cámara lo dejó preso por homicidio simple, con un máximo de 25 años de cárcel.
Fuentes judiciales adelantaron a Télam que si hubo abuso el juez Ríos acusará a Mangeri por homicidio doblemente agravado por "femicidio" (cuando la víctima es una mujer y mediare violencia de género) y por "críminis causa" (cuando se mata para ocultar otro delito, en este caso el ataque sexual, y lograr la impunidad).
Ángeles "Mumi" Rawson (16) desapareció el lunes 10 de junio cuando regresaba de una clase de educación física hacia el departamento de la planta baja "A" del edificio de Ravignani 2360, en el barrio porteño de Palermo donde vivía con su madre, su padrastro y sus hermanos.
Al día siguiente, su cadáver fue hallado en el predio de la CEAMSE de la localidad bonaerense de José León Suárez, y por el crimen fue detenido Mangeri, quien era el portero del edificio y se autoincriminó cuando declaraba como testigo ante la fiscal del caso, María Paula Asaro.
Los estudios de ADN determinaron que había perfil genético del portero debajo de tres uñas de la mano derecha de Ángeles -con un 99,9 por ciento de precisión en el caso del dedo índice-, lo que sugiere que ella alcanzó a rasguñarlo en un intento de defensa.
Mangeri nunca confesó formalmente el hecho en las cuatro indagatorias que tuvo a lo largo de la causa y la única vez que habló públicamente desde la cárcel con un canal de TV dijo que era "inocente".
Miércoles, 6 de noviembre de 2013