Hay que asumir la responsabilidad nada más
La unidad del PJ
Desde todos los sectores dirigenciales se habla de la necesidad de lograr la unidad partidaria, la cual es totalmente necesaria para poder lograr el objetivo de acceder al poder provincial para cambiar la realidad que vive Corrientes desde hace una una década y media .-Pero en muchos casos y dependiendo de quienes la invoquen dicha necesidad se convierte meramente en intereses particulares y sectoriales
A nivel provincial y en las localidades la realidad es la misma, se habla de unidad, se dice que están unidos, que se está trabajando en dicho sentido, pero generalmente son solo palabras de conveniencia. Todos declaman la UNIDAD, pero muy pocos son quienes la tratan de construir seriamente.
Para que haya UNIDAD deben de haber indefectiblemente desprendimientos y hoy eso está muy lejos de ser una realidad para varios de los sectores partidarios, nadie trabaja en base a los consensos, a las coincidencias, sino que lo hacen a partir de su propia conveniencia, una suerte de que la UNIDAD se construye detrás de uno.
Está por hacer un año que el PJ tiene nuevo presidente, el Prof. Gerardo Bassi, y hace más de un año y medio que se lo eligió, para lograr la UNIDAD, en donde por cierto sí hubieron desprendimientos de uno de los sectores más influyentes del partido para que se pudiera llegar de la mejor manera posible a las elecciones pasadas tratando de sanar todas las fisuras. Desde que se lo eligió y luego desde que asumió, allá por agosto del año pasado, el partido sigue a la deriva en una suerte de horizontalismo dirigencial ya que desde las autoridades constituidas todavía no se atinó a convocar al Consejo Partidario ni al Congreso, es decir que los cuerpos orgánicos aún siguen sin juntarse, por lo tanto la dirigencia se maneja de manera horizontal, cada uno decide, junto a su grupo de pertenencia, que es lo que se debe hacer sin tener una unidad de criterio total. De esa forma, y a pesar de que Bassi se encarga de, a modo de muletilla, recitar la necesidad de la UNIDAD partidaria en cuanto acto asiste, hasta tanto los cuerpos no se reúnan para trabajar con vistas al 2017, nada se podrá hacer y dicha unidad seguirá siendo una mera muletilla discursiva.
Cuando allá por fines del 2014, y durante el 2015, habían compañeros que reclamaban un cambio de conducción, se llegó a que hubieran compañeros que resignaran sus posiciones, que relegaran todo lo que se había construido en pos solamente de no ahondar diferencias que perjudiquen la performance del partido en las elecciones pasadas y es así que quienes reclamaban cambios en la conducción lograron su cometido, fueron ungidos en autoridades partidarias pero hasta la fecha, hace casi un año ya, todavía no asumieron la responsabilidad de conducir al peronismo, ya que con tan solo algunas rees aisladas y sin la responsabilidad propia del conductor, nada hasta la fecha se ha hecho, tan solo proclamar la UNIDAD, pero sin hacer nada para concretarlo. Esta situación se replica en la mayoría de las localidades en las que se tuvo que forzar arreglos para evitar complicaciones electorales futuras, es tan así que las campañas electorales fueron conducidas no por las autoridades partidarias sino por quienes ya habían dejado de serlo.
Lamentablemente algunos dirigentes siguen sin entender el significado real de la palabra UNIDAD, y solamente la usan para sus fines personales. El presidente del PJ todavía pareciera que no asumió cuál es su rol dentro del partido, razón por la cual se sigue manejando solamente como el intendente de Goya, mientras que las decisiones partidarias y el manejo del PJ se siguen dando desde los mismos sectores que anteriormente lo conducían, a pesar de haber dado en su momento el paso al costado para lograr la reclamada UNIDAD, UNIDAD que por cierto no se logró.
Bassi se maneja más como un dirigente en campaña para una candidatura personal que como el titular del mayor partido de la provincia, rees aisladas, con poco consenso por cierto, e indefectiblemente direccionadas a posicionar a uno de los sectores partidarios dando por tierra cualquier intención de trabajar seriamente en base a las coincidencias.
Es innegable que con un peronismo que no se encuentre unido muy poco se podrá hacer por Corrientes, pero también es cierto que mientras no se asuman los roles partidarios de cada uno tampoco se podrán trabajar en los consensos y por sobre todo mientras que el PJ reunido no determine y reafirme sus parámetros ideológicos.
Mientras se proclama que sin Fabián y Camau juntos no se logrará la gobernación el año venidero, desde el sector de Camau, dirigentes que se creen más papistas que el Papa, fogonean, tal vez inconscientemente, la profundización de las diferencias sin entender que los basamentos políticos se deben dar de adentro hacia afuera; no se puede pretender ser el candidato del PJ trabajando en alianzas por fuera del propio partido, se deben lograr los consensos necesarios adentro del partido para luego si aglutinar a otras fuerzas en torno a dicho consenso. Como siempre se dice no se puede poner el carro delante de los caballos, salvo que la intención no sea llevar el carro hacia adelante.
De nada sirve declamar la UNIDAD si no se está dispuesto a tener desprendimientos, de nada sirve declamarla si no hay sinceridad y honestidad intelectual y de nada sirve hablar de UNIDAD si antes no respetamos la LEALTAD.
Las localidades del interior provincial, las más importantes por cierto, son el reflejo de lo que pasa a nivel provincial. Autoridades partidarias en ejercicio hablando de la necesidad de la UNIDAD y apelando muchas veces a las mentiras, a las falsedades, inventando rees con referentes en donde ni siquiera los presuntos participantes sabían de la misma, poniendo fotos en las cuales no están los que se dicen que estaban, todo eso con el objetivo de hacer creer que determinadas personas, o personajes, son los gestores de la UNIDAD, nada más lejos de la realidad y que lo único que se logra es mayores diferencias, que no debieran existir si se hicieran las cosas de la forma correcta y no siempre en busca de réditos personales.
Todo esto seguirá sucediendo, y lamentablemente se va a alejar más la posibilidad de hacer acuerdos concretos y dirigidos hacia la ciudadanía, en tanto y en cuanto quienes tienen hoy la responsabilidad de dirigir el partido no asuman la misma. Si Bassi no se pone al frente del partido para convocar a todos y no tan solo a un sector determinado en el cual se referencia, sin entender que su referencia debe ser todo el peronismo y no una facción, el PJ seguirá siendo una fuerza desperdigada en busca de un norte, el cual saben todos donde está, sin tener quien indique el camino para llegar.
Definitivamente la UNIDAD se logrará cuando se trabaje en base a las coincidencias de cara hacia el pueblo y no tan solo en busca de intereses personales, intereses políticos que son lógicos y necesarios, pero todo en su justa medida y en su determinado tiempo, Perón decía que “el peronista que se cree más de lo que realmente es, deja de ser peronista para convertirse en oligarca”, cada dirigente debe entender el lugar que deba ocupar atendiendo al interés general, y hoy no está sucediendo eso, a la necesaria UNIDAD solamente se la está proclamando como latiguillo de discursos vacíos.
En la mano de los compañeros dirigentes está el futuro no solo del peronismo, sino del pueblo correntino, dejémonos de solamente proclamar la UNIDAD y pongámonos a trabajar en construirla, y por sobre todas las cosas que las autoridades asuman la responsabilidad que les cabe.
Es imprescidible reunir los cuerpos orgánicos del partido, Consejo y Congreso provincial, es el reclamo generalizado, no se puede estar pensando en no reunirlos a fin de no perder alguna votación o de tener que relegar alguna posición sectorial. Hay que asumir la responsabilidad nada más.
(Por Carlos A. Pérego). Momarandú
Lunes, 6 de junio de 2016
