ANTE CHACARITA
Boca Unidos logró un sufrido triunfo
El equipo correntino se impuso de local 1 a 0 a Chacarita con gol de Franco Cángele en el inicio del juego. El “Aurirrojo” fue superado claramente por un rival, que no debió retirarse con las manos vacías.
RUBEN POLETTI
rpoletti@ellitoral.com.ar
Su segundo triunfo consecutivo en calidad de local concretó ayer Boca Unidos, al superar a Chacarita Juniors por 1 a 0, con gol marcado al comienzo del partido por Franco Cángele, en el regreso del ex Boca Juniors al fútbol argentino.
El encuentro, correspondiente a la tercera fecha del torneo de transición de la Primera B Nacional, fue ampliamente favorable a la visita, que hizo los méritos necesarios para no irse de Corrientes con las manos vacías.
Decidido a hacer pesar su localía salió el equipo correntino, a partir del pitazo inicial del árbitro Ramiro López. En la primera situación favorable, Fabro ejecutó un tiro de esquina desde el sector izquierdo, Fernández no se movió de su arco, y Cángele, entrando por el palo más lejano, se anticipó a Zbrum para amortiguar la pelota con el empeine del botín de su pierna izquierda para marcar la apertura del resultado.
El gol pareció conformar al “aurirrojo”, que se quedó. Chacarita comenzó a manejar la pelota y dominar el encuentro a partir de la zurda exquisita de Damián Manso, ganándole al local el duelo en la mitad de la cancha.
Con tiempo y espacio, el “Piojo” encontró casi siempre los claros en la defensa local donde colocar estiletazos que llevaron su sello.
En un minuto, el “funebrero” creó tres claras situaciones de peligro para marcar el empate. En una triangulación Manso, Coniglio y Nahuel Menéndez, Henrricot salvó en el mano a mano ante el “gemelo”.
En el córner, el arquero se equivocó al salir, quedando a mitad de camino, y el cabezazo de un rival fue devuelto en “palomita” por Sánchez Paredes, que custodiaba el vertical izquierdo. En el otro tiro de esquina, la pelota le quedó a Mellado, cuyo remate a colocar de derecha rebotó en el palo izquierdo.
Boca Unidos no podía hacer pie en el partido. El equipo de la ribera no podía sostener la pelota cuando estaba en su poder, ya sea por imprecisiones propias, como por la presión que ejercía su rival.
Un remate rasante de Racca desde afuera del área, que se fue cerca del vertical derecho, tras un anticipo defensivo sobre Vergara, fue otro aviso de la visita.
Casi sobre el final del primer tiempo, y con todo Chacarita al ataque, Boca Unidos dispuso de una contra que pudo haber sido letal. A pura velocidad, Méndez pasó la mitad de la cancha y cedió para Cángele, que alargó hacia la derecha para Fabro, quien devolvió de primera para el ingreso por el otro sector de sus compañeros, pero la pelota se fue larga, perdiéndose por la línea de fondo.
Apenas iniciado el segundo tiempo, Fabro perdió ante la marca en una salida, la pelota derivó en Coniglio, que quedó sólo frente a Henrricot, tapando el arquero el remate del delantero, volviendo a salvar a su valla.
A los pocos minutos, Sánchez Paredes metió un muy buen pase al área para Cángele, que con su perfil favorable, en lugar de rematar de primera, pretendió parar la pelota, yéndose larga a las manos de Fernández.
El dominio del terreno y de la pelota seguía siendo patrimonio de Chacarita, que cada vez se volcaba más decididamente al campo correntino en busca del empate, apareciendo espacios para el contraataque de Boca Unidos.
Tras un rechazo del fondo correntino, llegó un centro al área local que fue cabeceado por Ré, salvando en la línea Alan Pérez, luego de que Henrricot quedara fuera de acción.
En la contra, Fabro se fue en velocidad por derecha, y cuando quedó cara a cara con Fernández, decidió meter el pase al medio para Sánchez Paredes, que acompañaba, cortando oportunamente Rosso.
Buscando respuestas desde el banco, Ricardo Rodríguez agotó rápidamente los cambios, haciendo ingresar a Galeano, Núñez y Hoyos en lugar de Méndez, Achucarro y Cángele, respectivamente.
Del otro lado, Gamboa puso a Oroz por Racca, quedando parado con tres en el fondo, y luego metió a Casa por un agotado Manso, y luego a Milla en lugar de Nahuel Menéndez, jugándose a cara o cruz en busca de la igualdad.
Sobre la media hora se lo perdió Coniglio, empujando la pelota por arriba del travesaño, ingresando por el segundo palo tras un tiro libre de Jonathan Menéndez que Rosso bajó de cabeza.
Boca Unidos resistía a duras penas las embestidas de Chacarita. Casa tuvo su oportunidad, pero su remate se fue alto. Enseguida, Milla le pegó de media vuelta, atajando Henrricot contra el palo derecho; y luego fue el turno de Oroz, cuyo tiro cruzado salió apenas desviado.
Entre ellos, el local contó con tres claros contraataques en superioridad numérica que pudieron sentenciar el juego, pero fueron desaprovechados por Núñez y Vergara.
Luego de tres minutos de adición que se hicieron interminables, el equipo correntino terminó quedándose con su segunda victoria en el campeonato. Los tres puntos es quizás lo único para festejar.
Desde aquel histórico Boca Unidos 1 - River Plate 0, que ganando de local, el equipo no había sido tan superado en el juego como ayer. Por lo que se observó, hay mucho por mejorar; debiendo el cuerpo técnico aprovechar ahora, que está dulce, y los resultados se le dan, para encontrar el mejor funcionamiento. Materia prima está demostrado que le sobra.
(El Litoral)
Lunes, 15 de febrero de 2016
