TENIS
Leo Mayer: “Voy a jugar contra mi ídolo; lo quiero disfrutar”
El correntino debutará en el US Open ante Roger Federer. “Al principio, dije ‘qué mala suerte’, pero después me tranquilicé”, contó el Yacaré sobre el resultado del sorteo. Ya se entrenó con el suizo.
“Al principio, dije ‘qué mala suerte’, pero después me tranquilicé. Voy a jugar contra mi ídolo, lo quiero disfrutar”.
Así, Leonardo Mayer contó cómo recibió el resultado del sorteo del US Open, que se iniciará mañana en Nueva York y en el que debutará contra el suizo Roger Federer.
“Ojalá que Federer esté vulnerable y le gane”, deseó el tenista correntino, que cayó en Shanghái en 2014 ante el suizo. “Lo principal es que voy a jugar contra Federer y trataré de disfrutar todo lo que pueda. Me voy a entregar al máximo”, señaló el Yacaré, 33º en el ranquin de la ATP, en una entrevista que publicó ayer Cancha Llena.
Mayer, la mejor raqueta argentina, se quedó a solo un casillero de los 32 preclasificados del US Open y el sorteo destinó que en la 1ª rueda se enfrente con Roger Federer, el suizo que a los 34 años ilumina rejuvenecido y sigue atemorizando, mucho más después de ganar en Cincinnati.
“La ciudad [Nueva York] me gusta para cuando vengo únicamente a jugar el torneo. Después, de vacaciones solo pasaría unos días y nada más. Vivir acá sería imposible, es un loquero. Las distancias son tremendas. Hay veces que desde el club tardamos una hora al hotel y te cansa mucho. Si me toca jugar a las 11 de la mañana tenemos que calcular bien para salir, para que no nos agarre el embotellamiento”, comenta.
El miércoles por la noche, Severin Luthi, entrenador y amigo de Federer, se comunicó con Javier Fernández, uno de los entrenadores del Yacaré junto con Leo Alonso, para proponerle un ensayo al día siguiente, bien temprano, con el ganador de 17 Grand Slam. El argentino ya tenía coordinado para el jueves por la tarde una práctica con el español Rafael Nadal. Pero no todos los días a un profesional se le presentan semejantes oportunidades y, entonces, aceptó ambos retos.
“El entrenamiento con Roger estuvo muy bien. Era la primera vez que entrenábamos juntos, entonces vinimos temprano con mi equipo, por las dudas (sonríe). Peloteamos y jugamos mucho. Fueron dos horas en total. Yo ya sabía que hace cosas muy buenas, pero te sorprende con algunos golpes que saca de la galera. Ya lo vi tantas veces en la tele que sabés que algo está por hacer. Fue muy amable”, contó.
“Estuvimos hablando un poco. Me preguntó por Boca. También sobre cuántos partidos eran los del campeonato argentino, porque se había enterado de que era largo. Y después me preguntó sobre la Copa Davis, si jugábamos en Bélgica, quiénes iban a jugar”.
Domingo, 30 de agosto de 2015