COPA LIBERTADORES
Gallardo, un ganador de raza: en un año en River, ya consiguió consagrarse campeón en tres oportunidades
Dejó los cortos para ponerse el buzo de entrenador. Su próspero destino quedó marcado al haber logrado rápidamente su primer título (en Nacional de Uruguay). Ya su segunda experiencia la afrontó en el club de sus amores, y el éxito no dejó de acompañarlo. Con la reciente consagración en la Copa Libertadores, sumó su tercer lauro en menos de un año y se convirtió en el único protagonista que logró el máximo certamen continental como jugador y técnico
La exitosa carrera que supo afrontar como futbolista (en la que cosechó 14 títulos a nivel clubes más un Oro en Jujegos Panamericanos y Plata en Olímpicos con la Selección), Marcelo Gallardo la está trasladando a su nueva faceta de entrenador a un paso arrollador. Al menos así lo reflejan los poco más de tres años que lleva sentado en el banco de suplentes.
Con el pie derecho inició su otra trayectoria, ya que apenas dejó los cortos y se calzó el buzo de DT, los logros no demoraron en llegar (ganó el campeonato uruguayo al frente de la conducción técnica de Nacional). Fue ese alucinante andar lo que provocó que enseguida se depositaran los ojos en él para ofrecerle importantes desafíos, pese a su escasa experiencia.
Fue el club de sus amores, River, el que logró seducirlo y lo contrató nada más ni nada menos que para reemplazar a un Ramón Díaz que inesperadamente pegó el portazo en junio del pasado año tras consagrarse en el Torneo Final y la Superfinal. No sólo al 'Muñeco' le tocaba hacerse cargo de uno de los elencos más grandes a nivel mundial, sino que además tenía su inicio bajo la sombra de un exitoso riojano.
Pero nada de eso le pesó a un Gallardo que no hizo más que agigantar tanto su historia personal como la de la entidad de Núñez. Su carta de presentación fue ni más ni menos que devolver a la 'Banda' a los primeros planos internacionales luego de 17 años. Sí, el 'Muñeco' lo sacó campeón de la Copa Sudamericana (el último lauro fuera del país había sido la Supercopa Sudamericana de 1997) y con el inolvidable agregado de haber eliminado en las Semifinales al rival de toda la vida: Boca.
A su vez, peleó hasta último momento el campeonato doméstico que terminó perdiendo ante Racing. Sin embargo, el subcampeonato que logró con 39 puntos lo tuvo dejando sus huellas. Los 34 tantos que marcó en el campeonato fueron la mejor marca en los últimos 16 torneos cortos; mientras que alcanzó el invicto más alto del profesionalismo en la historia del club, al hilvanar 31 partidos sin 'besar la lona'.
No conforme con estos formidables registros, el camino del éxito continuó. El 2015 lo arrancó alzando un nuevo trofeo al superar a San Lorenzo en la Recopa Sudamericana ganándole tanto la ida como la vuelta por la mínima diferencia). Dicha coronación le permitió ser el único en River que logró consagrarse campeón de copas internacionales como jugador (Libertadores 1996 y Supercopa 1997) y entrenador (las mencionadas Sudamericana y Recopa Sudamericana), como así también se transformó en el más ganador a nivel internacional.
Pero ahora, sin dudas, alcanzó su punto cúlmine, llevando a River a lo más alto de América, consagrándose en el certamen más importante del Continente: la Copa Libertadores. Luego de 19 años, el "Millonario" alzó el trofeo más preciado de su mano, ya que fue el gestor de un equipo que comenzó de mala manera el certamen, penando para clasificar en la fase de grupos, pero que terminó mostrando todo su poderío y su hombría.
Así, se convirtió en el único jugador en la historia de River en ganar la Libertadores como jugador y técnico. ¡Obviamente, el "Muñeco" ya merece un capítulo especial en los grandes libros de la institución!
Jueves, 6 de agosto de 2015